Dos pescadores españoles mueren cerca de Namibia

Una explosión en el barco causó un incendio que le hizo naufragar

EL PERIÓDICO / MADRID

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Dos pescadores gallegos del barco Díaz, propiedad de una empresa vinculada al grupo Pescanova, fueron dados ayer por muertos después de que el miércoles por la tarde se registrara una fuerte explosión en la sala de máquinas del buque, que originó un incendio, mientras faenaban frente a las costas de Namibia, en el África meridional.

El siniestro provocó una tercera muerte, la de un marinero originario de Namibia, entre los 25 trabajadores que se hallaban a bordo en el momento del siniestro, según informo ayer la firma Pescanova. Los supervivientes lograron abandonar el barco, que ayer por la tarde se hundió, en tres botes salvavidas. Diferentes embarcaciones que operaban en la zona acudieron rápidamente a rescatarlos.

La embajadora de España en Namibia, María Victoria Scola, explicó que desde que tuvo lugar la explosión, y hasta que el barco naufragó, "los equipos de rescate no pudieron acercarse ya que la embarcación estaba en llamas".

ORIGEN DESCONOCIDO

El buque siniestrado tenía unos 10 años de antigüedad y en ese periodo no había sufrido ningún percance, aseguraron sus propietarios. Se desconoce el origen de la explosión que propagó el fuego.

En el comunicado difundido por la empresa se añade que "se generó rápidamente un repentino e incontrolable incendio, por lo que el capitán decidió que se abandonara la nave cuando comprobó que la situación había llegado a un punto en el que estaban en peligro las vidas de los tripulantes".

El capitán y el primer oficial, ambos españoles, fueron trasladados junto al resto de los tripulantes al puerto de Walwis Bay, en la costa de Namibia, donde fueron atendidos. Algunos pescadores presentaban heridas de poca gravedad. La embajadora corroboró que los dos marinos españoles "se encontraban bien".