Manlleu quiere reducir el número de palomas

El Ayuntamiento de Manlleu y la Plataforma Animalista han puesto en marcha un programa piloto que tiene por objetivo reducir la gran población de palomas del municipio sin recurrir al exterminio de los ejemplares. El método ha comenzado con la construcción de un palomar para albergar a la colonia de aves de esta especie y darles de comer. Cuando las palomas se hayan habituado al recinto, un grupo de voluntarios sustituirá los huevos de las puestas por otros de cerámica, una medida que permitirá controlar el número de nacimientos.

El proyecto se ha inspirado en iniciativas similares emprendidas en ciudades de Gran Bretaña y Alemania, si bien la propuesta de Manlleu está en su fase inicial, ya que aún no han finalizado las obras del palomar que se construye en la zona deportiva de la población. Aunque las aves todavía no acuden a pernoctar, los técnicos ya las alimentan una vez al día en este lugar.

RESULTADOS A LARGO PLAZO

"El trabajo recién iniciado es lento y los resultados se verán a largo plazo", ha explicado Déborah Parris, miembro de la Plataforma Animalista de Manlleu. Tras evaluar los resultados de la iniciativa, está previsto levantar un segundo palomar en otra zona del municipio aún por determinar. El Ayuntamiento de Manlleu prevé asimismo abrir un registro de voluntarios dispuestos a participar en las tareas que requiere la ejecución de esta iniciativa municipal.

El consistorio quiere también aprovechar la campaña informativa que lleva a cabo a fin de difundir el contenido de la nueva ordenanza sobre animales de compañía para informar a los vecinos del programa de control de las palomas.

La normativa, aprobada en junio, pretende concienciar a los propietarios de animales domésticos sobre la conveniencia de vacunarlos e identificarlos mediante chips y les insta a recoger los excrementos de la calle, entre otras obligaciones. Las multas según el tipo de infracción oscilarán entre los 60 y los 3.000 euros.