¿Cómo nos afectan las infecciones de hongos?

DOCTOR JAUME CASAS / VOCAL D'OFICINA DE FARMÀCIA COL.LEGI DE FARMACÈUTICS DE BARCELONA

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Las infecciones por hongos afectan de una manera especial a las personas que presentan un sistema inmunológico deficiente. La diabetes, la obesidad, el embarazo, los cambios hormonales, así como el uso prolongado de antibióticos son factores de riesgo. Las mucosas, especialmente la boca y los órganos genitales, las uñas y la piel en general, son las zonas más afectadas. Debido a que estas infecciones se desarrollan lentamente, pueden pasar meses e incluso años antes de que una persona se dé cuenta de que necesita atención médica, por lo que pueden ser difíciles de tratar y su curación prolongarse durante mucho tiempo.

Dentro de este tipo de infecciones, una de las frecuentes es la causada por diversas variedades de cándida, especialmente lacandida albicans, que se localiza principalmente en la boca y en la zona vaginal. La bucal se presenta con las características manchas blancas (aftas), en lo que se conoce popularmente comomal blanco, produciendo malestar al comer, picor y sensación de inflamación. Su diagnóstico es benigno, pero la afección es molesta, y, en ocasiones, invalidante para comer.

Por otro lado, especialmente en verano, lacandida albicansafecta también a zona vaginal. Sus síntomas suelen ser escozor e irritación en la zona, y, en ocasiones, dolor en la micción o durante las relaciones sexuales, acompañado a veces de secreción vaginal anormal. Al igual que la candidiasis bucal, el tratamiento suele ser a base de medicamentos específicos en forma de cremas y/o pastillas, pero es importante adoptar medidas higiénicas preventivas y anticontagiosas.

Otro tipo de infección fúngica frecuente es la que se localiza en las uñas, tanto de manos como de pies. Cualquier persona es susceptible de ser infectada por este tipo de hongos, pero suele ser más común en adultos mayores de 60 años y con sistema inmunológico deficiente. Los niños presentan raramente esta enfermedad. En caso de estar ya infectado, se deben mantener las uñas cortas y limpias, pero con la precaución de no utilizar el mismo cortaúñas que se ha utilizado para la limpieza y corte de la uña infectada.

Si la actividad obliga a tener las manos siempre mojadas, como por ejemplo lavar platos, utilizar guantes de algodón y otros de protección impermeables. Para los dedos de los pies, mantener los pies secos, con zapatos que no aprisionen los dedos y, si es posible, ventilados, evitando siempre andar descalzo en áreas públicas, como piscinas o vestuarios.