INTERFERENCIAS

Sitges-2017: la jornada del sábado, en píldoras

De la Màquina del Temps a Santiago Segura a la decepción de 'The bad batch' y el 'punch' de 'Hounds of love'

Jason Momoa, en un fotograma de 'The bad batch'

Jason Momoa, en un fotograma de 'The bad batch'

Juan Manuel Freire - Julián García / Sitges

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Màquina del Temps para Santiago Segura

Santiago Segura, enjuto, flaquísimo, casi transparente, ha venido a Sitges con película bajo el brazo, 'Solo se vive una vez', alocada comedia argentina en la que da vida al lugarteniente de un famoso con rostro y cuerpo de Gérard Depardieu.  Pero también ha venido para recibir una Màquina del Temps. Su buen amigo Guillermo del Toro le ha hecho entrega del galardón este sábado en el Auditori, con sentido abrazo del oso incluido.


Largo camino sin dirección

The bad batch', de Ana Lily Amirpour, cuenta con los que serán, quizás, los mejores primeros 20 minutos de todo Sitges-17. El único problema: tiene otros 99. Tras la exhibición inicial de tensión visceral y cine físico, al estilo del Aja de 'Las colinas tienen ojos', esta odisea seudorromántica a través de un escenario salvaje se muestra carente de coherencia dramática y tensión narrativa. Decepción.


Angustia en 'Hounds of love'

Quienes hablaban de 'Hounds of love' como un debut australiano a la altura de 'The babadook' no mentían. Este 'thriller' dramático sobre una pareja de psicópatas y la joven secuestrada que trata de desmontar su juego sacude al espectador con pocas palabras bien dispuestas, actores mayúsculos, dirección estilizada pero rigurosa… El debutante Ben Young sabe que la violencia es peor sugerida que mostrada.


Johnnie To, azulgrana al 100%

El director y productor hongkonés Johnnie To, icono del 'thriller' hongkonés con clásicos de acción como 'Breaking news' y 'Election', fue premiado en el 2005 con una Màquina del Temps que recibió de manos del mismísimo Quentin Tarantino. Estos días, el maestro To visita Sitges como ilustre invitado y este sábado ha dejado con la boca abierta a la concurrencia por su inesperado atuendo 100% azulgrana: nada menos que un elegante chándal azul marino del FC Barcelona, con sudadera de manga larga interior y gorra también blaugranas.