Los 50 años del festival de Sitges

La etiqueta de principal certamen de cine fantástico del mundo no es gratuita en el caso del festival de Sitges, que afronta la que será su 50ª edición. Y lo hace con una apabullante oferta que está a la altura de tan magna celebración. Los aficionados al género, y al cine sin más, tendrán a su disposición hasta el 15 de octubre un total de 1.771 horas de cine concentradas en 255 películas de 16 secciones distintas. Si bajo la dirección de Ángel Sala, a cargo del festival desde el año 2001, ese crecimiento en la oferta ha sido una constante, no podía ser menos al llegar al medio siglo. Y Sitges lo hace en un estado de forma excelente, por su propia consolidación y por el auge de un género que en otros tiempos quedaba algo limitado al público más fiel. Como recogía este periódico, el festival ha sido –además de un refugio para esos espectadores– una excelente escuela formativa para nombres hoy relevantes del cine español como J. A. Bayona, Jaume Balagueró o Jaume Collet-Serra.

Sitges se inaugura este jueves con quien es el padrino de esta 50ª edición: el mexicano Guillermo Del Toro y su última película, 'La forma del agua', reciente ganadora del León de Oro en Venecia. A su lado, asistirá otro director absolutamente referencial como es William Friedkin, padre de una obra maestra del género, 'El exorcista'. Y el festival tiene como protagonista a un personaje capital del género de terror, sea literario o cinematográfico: Drácula. Una oferta, en definitiva, que hace presagiar una merecida edición de récord.