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'La historia de Lisey', amor y terror más allá de este mundo

Stephen King, Julianne Moore, Clive Owen y el director Pablo Larraín forman el 'dream team' de esta ambiciosa serie de terror de Apple TV+

'La historia de Lisey', amor y terror más allá de este mundo

'La historia de Lisey', amor y terror más allá de este mundo / Apple TV+

Juan Manuel Freire

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Muchas historias de Stephen King están protagonizadas por escritores, pero no tantas por las mujeres que les acompañan y soportan. 'La historia de Lisey', su no demasiado conocida novela de 2006, habla menos de Stephen que de Tabitha, su esposa, clara inspiración del personaje de Lisey Landon, viuda del escritor Scott Landon, ganador del Pulitzer y el National Book Award. Puede que King no haya obtenido ni un premio ni otro, pero, oigan, tiene dos Edgar, entre muchos otros reconocimientos. 

Al autor de 'Carrie' y 'El resplandor' le rodea, además, la misma admiración fanática que Scott sufrió en vida (un fan loco llegó a tratar de asesinarle durante la inauguración de las obras de una biblioteca) y Lisey está sufriendo tras la muerte de su marido. Un acosador peligroso, Jim Dooley, quiere a toda costa que las obras inéditas de Landon vean la luz y considera a Lisey su enemiga, el principal obstáculo en la obtención y disfrute de esos incunables sagrados.

Lisey, simplemente, se ha tomado su tiempo, dos años, para enfrentarse a todos los documentos que su marido dejó atrás, en parte por miedo a que sucediera lo que inevitablemente sucede. El desbloqueo de recuerdos oscuros; el regreso a ese mundo paralelo donde Scott huía para escapar del dolor; el reencuentro con la muerte de su marido. Descrita cerca del comienzo del libro en estos términos terroríficos: "Al final, la cosa había regresado en busca de Scott, la cosa que a veces vislumbraba en espejos y vasos de vidrio, la cosa del costado moteado. El chaval larguirucho". 

Una historia personal

Hemos tenido que esperar década y media para ver una adaptación de este relato de amor y terror, de amor más allá de la muerte y de nuestro mundo. El principal motivo parece el afán protector del autor con esta obra. Para King, esta es una historia especialmente personal, nacida del incidente que por poco no le envía al otro barrio en 1999. Mientras caminaba cerca de su casa en Maine, fue atropellado por una minivan Dodge Caravan y acabó con serias lesiones, sobre todo en la pierna derecha: "La pierna había quedado tan maltrecha que hubo que realizar dos incisiones profundas (fasciotomías medial y lateral, en terminología médica) a fin de aliviar la presión ejercida por la tibia rota, y para que pudiera volver a circular la sangre por la parte inferior de la pierna. Es probable que sin las fasciotomías, o de haberlas realizado más tarde, hubiera sido necesario amputarme la pierna", recordaba en su libro de memorias/manual de escritura 'Mientras escribo'.

Mientras estaba en el hospital aquejado de neumonía, otro efecto colateral del accidente, su esposa Tabitha decidió redecorar el estudio donde solía escribir. Al volver a casa y ver su estudio vacío, sin muebles y con las alfombras enrolladas, pensó que ese sería el aspecto de su lugar de trabajo cuando él muriese. De ahí nació 'La historia de Lisey', una tan personal que solo King podría tocarla, retocarla, adaptarla para la gran pantalla. Durante años, rechazó de pleno que lo hicieran otros.

Nada es infilmable

Según ha explicado en alguna entrevista reciente, King se sintió inspirado por el trabajo de Tom Rob Smith en 'American Crime Story: El asesinato de Gianni Versace', escrita íntegramente por dicho novelista criminal. Creyó que él podía hacer lo mismo con 'La historia de Lisey': desarrollar un relato visual extenso, serpenteante y obsesionante. Acabó cumpliendo la misión con el respaldo de J.J. Abrams en la producción y Pablo Larraín ('Jackie', 'Ema') como productor y director. Apple TV+ acaba de estrenar sus dos primeros episodios.

No parecía fácil adaptar a la pantalla un relato tan interno: Lisey habla consigo misma, con las paredes o con su marido muerto (quizá solo sea la ventrílocua en su interior) mientras trata de reunir las pistas que le liberen del acosador fanático y saquen a su hermana Amanda de un estado de catatonia. Pero King y Larraín han sabido convertir las dificultades en oportunidades. 'La historia de Lisey' es un experimento narrativo fascinante, lejos de cualquier corsé televisivo, en constante sintonía con el flujo del pensamiento y la lógica del sueño. Hay recuerdos, pesadillas, pesadillas dentro de pesadillas y pesadillas dentro de recuerdos, todo ello entrelazado en un 'continuum' de dolor y pavor con rica fotografía de Darius Khondji

En el papel protagonista, Julianne Moore nos ofrece otra clase maestra de humanidad compleja: está oscuramente divertida cuando quiere, simplemente devastadora en cuanto se lo propone. Clive Owen es el mejor, más doloroso Scott Landon posible, mientras que Jennifer Jason Leigh y Joan Allen (ahí es nada) encarnan a las hermanas mayores de Lisey. Todo aquí es lujo, lujo insano. No dejemos que el desbordamiento del contenido infinito entierre en el desinterés una serie importante.

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