Gestión del duelo

Las 4 claves para superar el duelo por un animal de compañía

Oriol Comas, veterinario: "Una señora me dijo que quería más a su dálmata que a su hijo de ocho años"

La terapia con perros logra mejoras en la autoestima y el vínculo entre paciente y terapeuta

Un perro en una imagen de archivo.

Un perro en una imagen de archivo. / AGENCIA SINC.

Fidel Masreal

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Barcelona
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Para todos los que duden de que la muerte de un perro o un gato puede generar un duelo parecido al del fallecimiento de una persona, valga esta realidad, no tan infrecuente: "Una señora me dijo que quería más a su dálmata que a su hijo de ocho años; otra me dijo que quería más a su perro que a su marido; son casos que te encuentras cada vez más". Son palabras de Oriol Comas, veterinario de BalmesVet Barcelona, con 25 años de experiencia. La muerte de ese tipo de animal de compañía genera, por tanto, emociones intensas que conviene atender y preparar.

Tenía pendiente hacer las paces con la muerte y lo de mi perra abrió la caja de pandora, me enfrenté a ello

Amaya Ferrer

— Experta en Duelo y Tanatología Ética

Emociones tan intensas como la que experimentó Amaya Ferrer, cuya historia se hizo viral al recorrer el camino de Santiago con las cenizas de su perra Kyla, tras una eutanasia. "El duelo me sacudió fuerte, necesitaba respuestas". Ferrer tiene una historia personal de duelos, comenzando por el de la muerte de su abuela. "Tenía pendiente hacer las paces con la muerte y lo de mi perra abrió la caja de pandora, me enfrenté a ello". Ahora habla no tanto de muerte de Kyla como de la integración de su perra en su vida.

A ella no le sorprende que haya quien sufra más la pérdida de un no humano: "no se trata de la especie sino del vínculo, el duelo se complica en función de ese vínculo y de las circunstancias de la muerte".

Primero, preparar

Oriol Comas explica que el duelo por estos animales es el mismo proceso que el duelo por un ser humano. Ante casos de eutanasia, muy comunes, se trata de explicar a los propietarios que va a pasar, mentalizarlos para "un momento duro". Empatizar con estas personas, añade Comas, es más importante que hablar mucho. "Se trata más bien de escucharlos, entenderlos y no usar frases como 'esto pasará'", detalla.

Sufrí un trastorno por duelo prolongado. Ahora ayudo a los demás para que tengan lo que me faltó

Amaya Ferrer

— Experta en Duelo y Tanatología Ética

Amaya Ferrer, que se ha formado tras la pérdida de Kyla en tanatología y ha formado grupos de ayuda mutua, habla de un "huracán emocional" que debe ser canalizado. "Es importante buscar una red de apoyo, de pareja o amigos, leer, estudiar. Es decir, "expresarse, hablando, escribiendo, haciendo deporte". Ferrer ha tenido una amarga experiencia: hacerse viral tuvo una cara B. críticas en las redes, descalificaciones, que le provocaron, relata, un trastorno por duelo prolongado. "Ahora ayudo a los demás para que tengan lo que me faltó", explica con satisfacción.

Segundo, las emociones del duelo

El veterinario de Balmesvet explica su experiencia con las distintas reacciones que provoca esta pérdida de un animal: "Hay fases de mucho dolor, de negación, después buscan culpables y a veces se consideran culpables ellos mismos por no haber acudido antes al veterinario, otros culpan al veterinario porque lo pasan peor viviéndolo como una culpa propia".

Hay fases de mucho dolor, de negación, después buscan culpables y a veces se consideran culpables ellos mismos

Oriol Comas

— Veterinario de Balmesvet

Al final, llega la aceptación. Amaya, por ejemplo, dice que ha logrado "un proceso de integración, más que de pérdida; si lo elaboras de forma saludable, dejan un legado".

Tercero, encarar la eutanasia

La eutanasia, según los expertos, ha cambiado notablemente. Clínicas como Balmesvet cuentan con salas adaptadas. Y con un procedimiento que hace, por ejemplo, que el papeleo se lleve a cabo antes, para favorecer después poder irse sin más complicaciones a casa. A veces la familia se queda horas en la sala tras la eutanasia. Existen también crematorios presenciales. Y la clínica está preparada para situaciones, no excepcionales, de crisis de ansiedad.

A los niños hay que explicarles la irreversibilidad de la muerte, sin metáforas

Amaya Ferrer

— Experta en Duelo y Tanatología ética

También existe la posibilidad de llevar a cabo la eutanasia en casa, según explica Amaya, acompañada de rituales, ceremonias, que también incluyan a los niños. Todo ello debe organizarse previamente de la mano de los veterinarios.

Cuarto, sí explicarlo a los niños

Amaya y Oriol coinciden plenamente: a los niños no se les debe ocultar nada sobre la muerte de su gato o su perro. "No debemos escondernos a llorar, los niños se dan cuenta, hay que explicarles la irreversibilidad de la muerte, sin metáforas", recomienda ella. "Se deben evitar las explicaciones fantásticas; los niños lo pasan mal según como lo viven los padres, si los padres lo viven con normalidad, los menores también lo afrontan mucho mejor.

El duelo que nos preocupa es el de los adultos, es mucho peor", detalla él. Las situaciones más difíciles se producen cuando se engaña a los menores diciendo cosas como que el perro se ha perdido. Dos buenos cuentos para ayudar a los niños son 'Yo siempre te querré' de Hans Wilheim y 'Dentro de tu corazón', de Sumara Marletta.

¿Y qué pueden hacer los amigos y el resto de la familia? Amaya recomienda una herramienta muy útil en casi todas las situaciones terapéuticas y de duelo: "Si no sabes al respecto, el silencio es muy saludable".