Emociones y creación

Cuando la escena escucha el malestar: teatro y salud mental

Mariona Esplugues, actriz: "Hay espectadores que reciben estas obras como oxígeno"

Debate en Barcelona sobre artes escénicas y salud mental en el centro cívico Sandaru.

Debate en Barcelona sobre artes escénicas y salud mental en el centro cívico Sandaru. / EPC

Marc Darriba

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Barcelona
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Desde la autoficción hasta el humor provocador, el teatro puede funcionar como un espacio terapéutico, simbólico y colectivo. Así lo proclaman diversos creadores reunidos en torno a un debate sobre artes escénicas y salud mental, organizado por 'Freqüència Escènica Modulada'. “Cuando me formaba como actriz no imaginaba que usaría el escenario para contar mi historia”, explica la actriz y pedagoga Mariona Esplugues. Con 'Boja', ha recorrido escenarios de toda Cataluña compartiendo su experiencia con la salud mental.

Sonia Gómez, bailarina y coreógrafa, reivindica la fuerza expresiva del cuerpo maduro, rompe estereotipos sobre edad y fragilidad desde el escenario: “Hacer el gamberro en escena con más de 50 años tiene un impacto brutal”.

No solo hay que hablar de salud mental cuando las cosas van mal. También debemos celebrar momentos de calma

Xavi Domènech

— Director escénico vinculado a proyectos como AlucinArte y la librería Arkham Comics de Barcelona

Xavi Domènech, con varios años de trayectoria en talleres de creación con personas con trastornos mentales, advierte: “A veces, quien convive con un malestar mental no quiere hablar de ello en escena, sino descansar un rato”. Domènech defiende una práctica teatral abierta, que no parta necesariamente de un discurso dramático, sino de un espacio de juego, presencia y creatividad compartida.

Recolocar el dolor

Los tres artistas comparten la necesidad de establecer límites emocionales durante el proceso creativo. “Hay días en que necesitaba parar los ensayos porque el dolor debía recolocarse. Poner límites también es cuidarse”, advierte Mariona.

¿Estigma? presente

La salud mental, aunque cada vez más presente en los medios y en la agenda cultural, sigue arrastrando estigma. “Seguimos separados; la salud mental sigue siendo una alteridad”, opina Sònia. Y Xavi añade: “Aún se utilizan etiquetas como ‘teatro inclusivo’ que nos acercan, pero también nos marcan como distintos”.

Seguimos separados; la salud mental sigue siendo una alteridad

Sònia Gómez

— cocreadora de Calidoscòpica

No es una realidad puntual

Las artes escénicas pueden tener un gran impacto en el público. “Hay espectadores que reciben estas obras como si respiraran oxígeno”, dice Mariona. Al final de cada función, muchas personas se acercan para compartir que han encontrado en estos espacios un lugar seguro donde expresarse y sentirse comprendidas.

Barcelona 02/04/2025 Sociedad. Debate en Barcelona sobre artes escénicas y salud mental en el centro cívico Sandaru. AUTOR: MANU MITRU

Debate en Barcelona sobre artes escénicas y salud mental. / EPC

Mariona, Sonia y Xavi están de acuerdo: la salud mental no debería ser solo como una temática puntual, en los escenarios sino una realidad cotidiana que afecta a todos y debe abordarse desde el respeto, la complejidad y la colectividad. “No solo hay que hablar de salud mental cuando las cosas van mal. También debemos celebrar los momentos de calma”, recuerda Xavi.

Los límites de la autoficción

Mariona Esplugues explica que ha necesitado tiempo y trabajo para representar su vida con cierta distancia emocional: “He contado la historia tantas veces que he soltado gran parte del dolor. Ahora la abrazo con distancia”.

La clave es que la historia sea tuya, pero pueda ser la de muchas otras personas

Mariona Esplugues

— Actriz y pedagoga

Xavi Domènech alerta: la autoficción puede ser muy poderosa, pero también remover mucho: “Siento emociones encontradas”. “Se necesita acompañamiento y maduración -concluye- para que la exposición personal no pase factura emocional”. Los tres artistas concluyen con una idea básica: para que una historia conecte, debe ser personal, pero también resonar con otras. “La clave es que la historia sea tuya, pero pueda ser la de muchas otras personas”, describe Mariona.