Psicología

Así ha afectado la pandemia de covid a nuestra salud mental

La ruptura en la cotidianidad puede dejar secuelas psicológicas

Archivo - Pérdida de olfato por el Covid-19

Archivo - Pérdida de olfato por el Covid-19 / ENGIN AKYURT - Archivo

Ángel Rull

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La pandemia del COVID-19 ha sido un fenómeno que ha afectado a todas las dimensiones de la vida humana, incluyendo la salud mental. Desde que se declaró la pandemia en marzo de 2020, muchas personas han experimentado un aumento significativo en el estrés y la ansiedad debido a la incertidumbre sobre el futuro, el aislamiento social, el cambio en la rutina diaria y la preocupación por la salud propia y la de los demás. Pero ¿en qué ha afectado exactamente la pandemia a la salud mental, tanto antes como durante y después la pandemia?

Salud mental antes de la pandemia

Antes de la pandemia, la salud mental ya era un tema importante, pero a menudo pasaba desapercibido. Muchas personas sufrían de trastornos mentales, como la depresión y la ansiedad, sin recibir el tratamiento adecuado. A menudo, estas enfermedades eran estigmatizadas y se consideraban como una debilidad personal. Además, muchas personas que sufrían de trastornos mentales no tenían acceso a los servicios de salud mental debido a la falta de recursos, el costo del tratamiento o la falta de cobertura médica.

A pesar de estas barreras, hubo un aumento en la conciencia de la salud mental en los últimos años antes de la pandemia. Las organizaciones de salud mental y los profesionales de la salud mental trabajaron arduamente para reducir el estigma asociado con los trastornos mentales y promover la importancia del cuidado de la salud mental. Los gobiernos también comenzaron a reconocer la importancia de la salud mental y aumentaron la financiación para los servicios de salud mental.

Salud mental durante la pandemia

La pandemia ha llevado a una mayor incidencia de trastornos de ansiedad y depresión. Muchas personas experimentan miedo y preocupación constante por su salud y la de sus seres queridos. La incertidumbre económica y laboral también ha aumentado los niveles de estrés y ansiedad.

El aislamiento social y la falta de interacción social cara a cara también pueden tener efectos negativos en la salud mental. La falta de contacto humano y la disminución de la actividad social pueden aumentar la sensación de soledad y aislamiento, lo que puede agravar la depresión y la ansiedad.

Los niños también pueden experimentar problemas de salud mental durante la pandemia. La educación online y la falta de contacto con los amigos y compañeros de clase pueden aumentar los niveles de estrés y ansiedad en los niños. Además, la preocupación constante por la salud de los padres y otros familiares puede afectar su bienestar emocional.

Las personas que ya tenían problemas de salud mental antes de la pandemia también pueden estar experimentando un empeoramiento de sus síntomas. La falta de acceso a los servicios de salud mental, la cancelación de las citas y la reducción de la oferta de servicios pueden hacer que sea más difícil para estas personas obtener la ayuda que necesitan.

¿En qué ha cambiado nuestra salud mental con la pandemia?

La pandemia ha sido una experiencia colectiva de estrés traumático, lo que significa que ha sido un evento que ha afectado a toda la sociedad. Este tipo de estrés puede tener un impacto duradero en la salud mental de las personas, especialmente si no se aborda adecuadamente. A medida que la pandemia ha continuado, hemos visto un aumento en los problemas de salud mental en todo el mundo.

La ansiedad y la depresión han sido dos de los problemas más comunes que las personas han experimentado durante la pandemia. Las personas han estado preocupadas por su salud, la salud de sus seres queridos y el futuro incierto. Además, las personas han experimentado aislamiento social debido a las restricciones de movimiento y la necesidad de distanciamiento físico. El aislamiento social puede ser un factor de riesgo para la salud mental, ya que las personas pueden sentirse solas, desconectadas y sin apoyo emocional.

Otro factor que ha afectado la salud mental durante la pandemia es la falta de rutina y estructura. Con muchos lugares de trabajo cerrados y las escuelas haciendo la transición a la educación a distancia, las personas han perdido la estructura diaria que les ayudaba a mantenerse enfocados y productivos. Además, muchas personas han experimentado problemas económicos debido a la pérdida de empleo o reducción de ingresos, lo que puede llevar a una mayor ansiedad y estrés.

La pandemia también ha afectado la forma en que las personas buscan tratamiento para problemas de salud mental. Con las restricciones de movimiento y las medidas de distanciamiento físico en su lugar, muchas personas han tenido dificultades para acceder a los servicios de atención médica. Además, algunas personas pueden haber sentido que buscar tratamiento para la salud mental no era una prioridad durante la pandemia, lo que ha llevado a un aumento en los problemas no tratados.

A pesar de los desafíos que la pandemia ha presentado, también ha habido algunos cambios positivos en la forma en que las personas piensan sobre la salud mental. La pandemia ha hecho que muchas personas sean más conscientes de la importancia de la salud mental y ha eliminado algo del estigma asociado con buscar tratamiento. Además, muchas personas han encontrado formas creativas de conectarse con amigos y familiares a través de medios digitales, lo que ha ayudado a aliviar la sensación de aislamiento social.

Como podemos ver, la pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto significativo en todos los aspectos de nuestra vida, incluyendo nuestra salud mental. Desde el inicio de la pandemia, las personas han experimentado una amplia gama de emociones, desde la ansiedad y el miedo hasta la tristeza y la incertidumbre. Con el paso del tiempo esto implica un desafío para el ámbito de la Psicología y los efectos que podrían darse a largo plazo, pero de los que aún podríamos no ser conscientes.

* Ángel Rull, psicólogo.