Sé feliz en el trabajo con estos trucos

Pasamos gran parte de nuestra vida en el trabajo, las relaciones giran en torno a los compañeros de trabajo y el bienestar global que sentimos tiene mucho que ver con nuestro puesto. Para muchas personas, la oficina es fruto de estrés, emociones negativas o frustración. Pero otros, sin embargo, independientemente de su labor, acaban siendo muy felices con aquello que hacen y con las personas con las que comparten la jornada.

¿Qué hace a un trabajador feliz? ¿Puedo yo también ser más feliz en la oficina? Si nos fijamos en qué hacen aquellos que tienen una alta satisfacción laboral, podremos introducir pequeños cambios personales que nos lleven hasta lo que ellos sienten y podamos mantenerlo en el tiempo.

Felicidad laboral

Disfrutar con lo que hacemos, estar satisfechos y sentir bienestar y felicidad no siempre depende de los factores externos. De hecho, es la parte interna la que más nos propicia a estar contentos y tener una buena calidad de vida laboral. Por eso, cambiando los factores adecuados, moviendo nuestra actitud e introduciendo pequeñas rutinas, podremos aumentar nuestro nivel medio de satisfacción.

Si quieres ser feliz en el trabajo, esto es lo que tienes que hacer:

1. Encuentra el norte

Cuando vivimos sin rumbo, sin un objetivo, todos los días son iguales. Nos levantamos, trabajamos en lo establecido para ese día, volvemos a casa y vuelta a empezar. Sim embargo, si lo que estamos haciendo tiene un propósito, aunque sea ahorrar para después buscar otro trabajo, tendremos la motivación suficiente para levantarnos por la mañana con energía. Por eso, mantén siempre a mano tus objetivos. Te ayudarán a avanzar con optimismo.

2. Empieza y acaba con algo positivo

Empieza tu jornada laboral con algo bueno, desde un café con los compañeros, una canción que te motive o una charla divertida. De esta forma, harás que cada día te apetezca llegar a la oficina, sin pensar en todo lo que debes hacer. Y acaba también con algo bueno, que cierre el día y te relaje, especialmente si ha habido algún momento negativo.

3. Apóyate

Los trabajos donde hay compañerismo y buenas relaciones, repercuten globalmente en la satisfacción. Busca afianzar lazos con las personas que tienes a tu alrededor, tanto dentro como fuera de la oficina. Serán un apoyo en los momentos malos y fuente de mayor bienestar en los buenos.

4. Espacio seguro

Es importante que el espacio donde pasas la mayor parte del tiempo esté lo más personalizado y confortable para ti, dentro de las posibilidades. Es el lugar que más ves y que repercutirá de forma directa en cómo te sientes. Añade fotos, un listado con tus metas o recuerdos de amigos.

5. Agradece

La gratitud es una de las fortalezas que mejor predice la satisfacción general. Si lo orientamos al trabajo, podremos aumentar nuestra sensación de felicidad. Focaliza en todo lo bueno que el trabajo te aporta cada día, en cómo te ayuda y cómo contribuye a que estés bien. Incluso en los días malos, debes agradecer todo lo positivo. Te ayudará también a desviar el foco.

6. Sal a la calle

Permanecer el 100% de la jornada laboral en el mismo espacio nos sobrecarga, genera ansiedad y emociones negativas. Por eso, a lo largo del día, busca salir fuera algunos minutos. Tomar el aire te hará desconectar y volver a ti.

Si no queremos que el trabajo sea algo tortuoso y aburrido, es momento de empezar a trabajar nuestra actitud y la forma de ver la oficina para lograr alcanzar el bienestar. No solo lograremos que nuestro día merezca la pena, sino que podremos contribuir a la satisfacción global de los demás y al rendimiento.

* Ángel Rull, psicólogo.