PSICOLOGÍA

Compagina tu vida laboral y social con estas claves

El equilibrio entre el ocio y el trabajo ayuda a eliminar la ansiedad y las emociones negativas

Iballa Ruano, alzada a hombros brazos en Hawái como campeona de la Copa del Mundo por sus amigos (entre ellas su hermana Daida, subcampeona).

Iballa Ruano, alzada a hombros brazos en Hawái como campeona de la Copa del Mundo por sus amigos (entre ellas su hermana Daida, subcampeona). / periodico

Ángel Rull

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Con el paso de los años vamos interiorizando la idea de que el trabajo y nuestros proyectos profesionales son una prioridad en nuestra vida. La exigencia y el sacrificio forman parte de nuestra personalidad. Y cuando dejamos a un lado las obligaciones, sentimos culpa y malestar. 

Sin embargo, vivir únicamente para el trabajo, sin tener tiempo para la familia o los amigos, tiene efectos negativos sobre nuestra vida: desciende el rendimiento, aparece ansiedad y se elimina la productividad. El problema crece según vamos teniendo mayores responsabilidades y llega un momento en el que no sabemos cómo solucionarlo.

consecuencias

La falta de equilibrio entre nuestras obligaciones y el ocio acaba generando una serie de consecuencias derivadas, que perpetúan el problema y lo incrementan con el paso del tiempo.

Las consecuencias, tanto a nivel mental como físico, son las siguientes:

  • Ansiedad.
  • Síntomas depresivos.
  • Dificultad en la toma de decisiones.
  • Deterioro en las relaciones.
  • Aislamiento y soledad.
  • Problemas cardiovasculares.
  • Tensión muscular.
  • Problemas gástricos.

Mantén el equilibrio

Uno de los mayores retos a los que nos enfrentamos en nuestra rutina diaria, es saber compaginar de forma equilibrada la vida social y laboral. Dedicamos una gran parte del día al trabajo y no nos suelen quedar ganas ni tiempo para poder quedar con los amigos. Intentamos los fines de semana recuperar el tiempo perdido, para a menudo se nos queda corto y nos genera también un gran desgaste.

A través de las siguientes tres claves, podrás mantener el equilibrio entre tu vida personal y profesional.

1. Define tus objetivos

Los objetivos son la base sobre la que vas a construir la productividad, hacia dónde dirigirás tus pasos. Si tus objetivos son meramente profesionales, tus pasos irán en esa dirección. Por lo tanto, si lo que buscamos es el equilibrio, debemos saber construir también otras metas. Marca nuevos objetivos, ya que si no lo haces, estos terminan por no existir.

2. Ten claras tus prioridades

Elige con criterio tus acciones, esas acciones alineadas con nuestros objetivos. Debes marcar qué pasos necesitas para llegar a esas metas finales. Puede ser, y suele ser, algo tan simple como hacer una llamada a tu mejor amigo para quedar con él.

Intenta concretar siempre. No sirve el querer hacer una acción y nunca ponerle una fecha. Esos planes se quedan en el olvido. Es importante en estas ocasiones siempre concretar un día y una hora para ello.

3. Disfruta y vive cada día

Acostúmbrate a vivir en el aquí y ahora. ¿Estás en una reunión? Vive ese momento, pon tu atención a lo que estás haciendo, a cómo hacerlo mejor. ¿Estás en una cena con amigos? Deja el móvil, quítate de la cabeza la lista de tareas para el trabajo. Sólo existe el ahora, así que disfrútalo.

Estas claves van a ayudarte a compaginar tu vida social y laboral de forma fácil. Esto reducirá notablemente el estrés que sentimos al no saber cómo mantener ese equilibrio. Recuerda tener siempre claros los objetivos, centrarte en lo importante, elegir tus acciones en base a eso y disfrutar cada momento.

Ángel Rull, psicólogo.