Causa una buena impresión en la entrevista de trabajo con estos consejos

Cuando se selecciona a una persona entre diferentes candidatos para un puesto de trabajo, no solo influyen los conocimientos y habilidades que se tienen sino también el aspecto o la impresión que esa persona genera en el reclutador. Aspectos como el saludo, la seguridad o la puntualidad son determinantes en la entrevista de trabajo.

Generar una buena impresión es algo que no siempre aparece si nos dejamos llevar por el miedo o si no tenemos en cuenta pequeños detalles que también afectan en la selección. Es por eso que debemos prestar atención a todo aquello que forma parte de la imagen que damos en las otras personas.

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Causa buena impresión

La primera impresión es fundamental cuando conocemos a alguien, y más si se trata de quien va a decidir si somos los candidatos idóneos para ocupar un puesto de trabajo. La decisión es tomada por ellos, pero nosotros tenemos la responsabilidad de influir de forma positiva o negativa en su elección.

A través de pequeños detalles podremos generar una buena impresión que hable sobre lo merecedores que somos del trabajo al que estamos optando.

1. Puntualidad

Debemos encontrar el equilibrio, ya que llegar tarde es un mal síntoma siempre, aunque tengamos una excusa factible, pero también lo es aparecer con demasiada antelación.

Si vamos a llegar tarde, debemos avisar por teléfono, explicando el motivo del incidente y diciendo cuánto tiempo estimamos que vamos a tardar. De esta forma reduciremos la imagen negativa que siempre causa el llegar tarde.

2. Aspecto físico

Cada puesto de trabajo va a requerir una apariencia específica a la que nos debemos adaptar. Ambientes de trabajo muy formales o puestos de alta responsabilidad requieren una apariencia muy cuidada. Otros puestos permiten una vestimenta más relajada, dentro de unos límites, pero no siempre siendo necesaria la corbata.

Hay que tener en cuenta que, aunque algunos puestos requieran uniforme, no debemos dejar de mostrar una preocupación por nuestro aspecto físico, y eso lo reflejamos en la entrevista laboral.

3. Ensaya el saludo

Según sea el ambiente y el clima de la entrevista, así como la cercanía que muestre el entrevistador, deberás adaptar tu saludo, desde apretar la mano con firmeza o dar dos besos. Siempre mostrando cercanía, respeto y seguridad. Es la primera impresión directa que vamos a generar en el otro.

4. Muestra confianza y seguridad en ti mismo

La confianza es una habilidad requerida en cada puesto de trabajo. Mostrar seguridad implica que seremos capaces de afrontar las situaciones que se vayan presentando en el día a día, apoyándonos en nuestras herramientas y fortalezas.

Para mostrar este hecho al entrevistador, debes mantener el contacto visual mientras hablas, sin desviar la mirada o jugar con las manos. Sé también seguro a la hora de hablar y responder a todas las preguntas. Para ello habla siempre de lo que realmente sabes, sin necesidad de inventar, ya que eso hará que dudemos y mostremos inseguridad.

5. Prepárate

Busca información sobre la empresa, la jerarquía y las funciones necesarias que ese puesto requiere. Es importante saber cómo es la mentalidad de la empresa y lo que buscan en sus empleados. Muchos de los entrevistadores ya buscan personas con valores alineados con los de la empresa.

Pero también debes preparar mentalmente toda la información que aparece en tu currículum y las posibles preguntas que puedan hacerte sobre funciones anteriores, habilidades o motivos de dejar trabajos. Esto evitará que te quedes en blanco o dudes cuando se te pregunte en la entrevista.

Encontrar trabajo no es solo cuestión de mandar currículums y hacer entrevistas de forma pasiva, sino que debemos ser conscientes de que somos responsables en un alto porcentaje de si somos seleccionados o no para ocupar la vacante. Es por eso que debemos cuidar ciertos aspectos que generen una buena impresión en el entrevistador.

* Ángel Rull, psicólogo.