Santa Coloma aprueba unos presupuestos municipales, de nuevo, condicionados por la pandemia

El Pleno del Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet (Barcelonès) aprobó este 15 de noviembre el presupuesto ordinario de forma inicial y que, remarcan desde el gobierno local, sigue condicionado por la situación de excepcionalidad generada por la pandemia del covid-19. “El presupuesto municipal mantiene y prioriza las actuaciones dirigidas a evitar la propagación del virus y reforzar aquellas que son imprescindibles para paliar los efectos de una recesión profunda”, defendieron desde el ejecutivo municipal.

La aprobación inicial de los presupuestos salió adelante únicamente con los votos a favor del PSC, que tiene mayoría absoluta en el consistorio. Por su parte, Ciutadans y ERC votaron en contra, mientras que desde En Comú Podem optaron por abstenerse.

“Presentaremos enmiendas a las cuentas aprobadas de forma provisional, con el objeto de mejorar algunas partidas y demostrar que otro modelo es posible”, señalaron desde Ciutadans para explicar el porqué de su negativa a los presupuestos. En la misma línea se expresaron los republicanos, quienes también esperan que el gobierno atienda a las enmiendas que presentará ERC: “Seguiremos haciendo propuestas constructivas para hacer de Santa Coloma de Gramenet una ciudad más justa, más feminista y más sostenible, en definitiva, más habitable”. Así, los ‘comuns’ también anunciaron que presentarán alegaciones y remarcan que aspiran a un presupuesto con “otra mirada sobre las políticas de seguridad, con una perspectiva ecofeminista, para hacer una ciudad mucho más amable, cuidadora y verde”.

Por su parte, la alcaldesa de Santa Coloma, Núria Parlon, defendió que, este año, “sabemos de las dificultades que muchas familias arrastran por culpa de la crisis generada por la pandemia, por lo que hemos incrementado el presupuesto en políticas sociales -haciendo un esfuerzo especial en atender la emergencia habitacional- e igualdad”.

Nuevos incentivos fiscales

El presupuesto contempla e impulsa nuevos incentivos fiscales orientados a la promoción económica en la ciudad, tales como la suspensión de la tasa de ocupación de vía pública (mesas, sillas y veladores), la reducción en el precio público por la recogida y gestión de residuos industriales y comerciales (reduciendo especialmente la tasa de aquellos autónomos y autónomas que realizan su actividad en su residencia habitual), o consolidando medidas que se impulsaron ya en el año 2021 como fueron la reducción en las tasas de mantenimiento de mercados municipales y mercados no sedentarios.

“La congelación del resto de figuras impositivas, especialmente la reducción del tipo aplicable al IBI, va dirigida a no aumentar la presión fiscal de las familias”, remarcan desde el gobierno del PSC.

Financiación exterior

Así, desde el consistorio aseveran que, este año, se prevé que la mayor fuente de financiación que recibe el Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet y que proviene principalmente de la transferencia en la participación en tributos que realiza la Administración del Estado, experimente un aumento muy significativo, tal y como cómo se recoge, en el anteproyecto de presupuestos generales del estado, actualmente en tramitación.

Estos mayores ingresos, "permitirán atender un mayor gasto en la limpieza del espacio público y edificios municipales, atender a las necesidades básicas de las personas y familias más vulnerables y aplicarlos a la seguridad ciudadana".

Los principales ejes

Reforzar e impulsar las políticas de igualdad y promoción social a las que se destina casi el 15,70% del presupuesto (18,77 millones de euros), el Servicio de atención domiciliaria (3 millones), emergencia habitacional (1 millón), comedor social (1,6 millones) o en las becas escolares, entre otros.

Las actuaciones en limpieza vial, edificios y mantenimiento, que “aumentan significativamente respecto al año anterior, con el objetivo de evitar la propagación de la pandemia convirtiendo el espacio público en espacios comunitarios seguros”. Casi 17 millones de euros se destinarán a los programas de limpieza vial y de edificios y equipamientos municipales.

Las políticas de seguridad que se refuerzan con la incorporación de 11 nuevas plazas de agentes de policía, la creación de dos plazas de subinspectores, la renovación del parque móvil adscrito a este servicio, además del proyecto de la nueva comisaría. Este área tiene un presupuesto de algo más de 10 millones, lo que supone un 7,94%.

Las políticas de Vivienda. Siguiendo con el Plan Local de Vivienda, “se destinan más esfuerzos a algunos de los programas iniciados por paliar la pérdida de la vivienda un año que verá la puesta en marcha de las viviendas dotacionales de la antigua escuela Miguel Hernández, la continuación del programa de adquisición de pisos por vía de tanteo y retracto, la reforma de antiguos locales municipales en vivienda destinados a la bolsa de alquiler social, o en la inversión de un millón de euros para gestionar el convenio con la SAREB”, afirman desde el ejecutivo local. A políticas de vivienda y urbanismo el consistorio destinará casi 11,5 millones, lo que supone el 9,54% del total.

Refuerzo de las actuaciones en política de educación. Es una de las que aumentan respecto al año anterior, con mayor dotación, 11,3 millones, por el mantenimiento de edificios escolares, actividades educativas y la puesta en marcha del nuevo modelo de gestión del servicio de guarderías municipales mediante la sociedad municipal Bressolgramenet SA. En esta área se gestionan los programas de planificación educativa por importe de más de un millón de euros y, en concreto, el programa de reutilización de libros y adquisición de ordenadores por importe de 965.770 euros. Este área supone un 9,49% del gasto total.

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