Vecinos de Santa Coloma reclaman ante el AMB que el parque de Can Zam deje de acoger macroconciertos

Miembros de la Plataforma en Defensa de la Serra de Marina i Can Zam se concentraron este martes a las puertas del Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) para reclamar que el parque de Can Zam de Santa Coloma de Gramenet (Barcelonès) se convierta en un "parque urbano, verde y frondoso". Critican que la propuesta de ampliación aprobada por el Ayuntamiento, que consolida el "claro polivalente" de 35.000 metros cuadrados donde se hacen macroconciertos como los del Rock Fest, supone "dañar" un espacio que debería ser un verdadero pulmón verde.

Antoni Sancho, miembro de la plataforma, deja claro que "no están en contra" de los macroconciertos, que se podrían hacer en dos campos de fútbol municipales situados justo al lado de Can Zam, y reclama que se tenga en cuenta la opinión de los vecinos. Por su parte, Esteve Serrano, primer teniente de alcaldesa del Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet, defiende que el espacio se destine a conciertos y otras actividades como ferias mientras siguen las fases de urbanización del parque. "Hemos iniciado una fase de urbanización de Can Zam pequeña que abarca un terreno que estaba cerrado desde hace años como consecuencia de las obras que hizo la Generalitat de Catalunya en su día para construir la línea 9 del metro. Nosotros decidimos urbanizar estes espacio que, de momento, es solo una parte de una fase del parque, y hemos hechos un proyecto de urbanización", defiende Serrano, .

El primer teniente de alcaldesa remarca que el tramo en el que trabaja ahora el consistorio es donde habitualmente se monta la feria de atracciones de la Fiesta Mayor, la feria de entidades o conciertos como el Rock Fest. "Así, en el pacto local para la reconstrucción tras la pandemia, destinamos un dinero para urbanizar esta zona. ¿En esta zona qué hacemos? Poner más árboles, alumbrado o arbustiva y dejar un espacio para poder hacer actividades [el claro polivalente]. ¿Quiere decir que es el proyecto final de Can Zam? No, Can Zam tiene todavía muchas más hectáreas por urbanizar y el proyecto no acaba aquí", añade Serrano, quien reconoce que, por ahora, es "un proyecto de mínimos".

Proceso participativo

Antoni Sancho asegura también que lo que el Ayuntamiento vendió como un proceso participativo abierto para decidir los usos del parque, no es otra cosa que una "encuesta interesada" enviada a determinados grupos de población que “no reunía las mínimas condiciones legales”. Lamenta también que el consistorio no tuviera en cuenta las alegaciones presentadas el pasado mes de julio por 23 entidades del municipio.

El primer teniente de alcaldesa considera las acusaciones "absoluta y rotundamente falsas". "En este proceso participativo participaron más de 5.000 personas, 1.300 de ellas de forma presencial, las demás mediante una encuesta que se llevó a cabo de forma legal y transparente y de acuerdo al reglamento municipal de participación ciudadana y de gobierno abierto que tenemos aprobado desde 2018", mantiene Serrano. "Se hizo atendiendo todos los artículos de cómo se abre un proceso participativo, cuál es su objetivo, cuáles son sus fases, cuál es el público al cual se dirige, cuál es el órgano responsable de su gestión, o el perfil de las personas convocadas a debate, o el periodo de tiempo que debe durar", añade. 

Por su parte, el representante vecinal asegura que mantener la zona donde "dos veces al año" se hacen conciertos era la tercera opción elegida por los vecinos que participaron en la consulta, lo que supone que no es una prioridad de la ciudadanía. "Santa Coloma tiene un déficit muy importante de zonas verdes y lo que hay que hacer es hacer de Can Zan un auténtico bosque", señala.

Serrano defiende también que en el claro polivalente que queda pendiente de urbanizar "se puede hacer desde un concierto o montar una carpa de circo o la feria de entidades que otros años montábamos con la Fiesta de Mayor o conciertos" "Los usos que el parque permite no son incompatibles con las actividades que hacemos ni con el proceso de urbanización", asevera.

La protesta de este martes, que se hizo coincidir con la reunión del Consejo Metropolitano y la Junta de Gobierno del AMB, persigue, asegura Sancho, que el ente metropolitano, propietario de los terrenos, haga presión para obligar al consistorio a hacer "marcha atrás" y escuchar la opinión de los vecinos.

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