Sant Jordi aprovechará el tirón de la Semana Santa

Sant Jordi calienta motores. El próximo día del libro será una fecha especial –aunque ya lo sea en sí misma-, en particular porque prolongará el carácter festivo de los días anteriores, los de la Semana Santa, que este año se celebrará inmediatamente antes, con el añadido de que el lunes de Pascua será la vigilia de la jornada. Tanto día de fiesta puede desconcertar al comprador, pero el Gremi de Llibreters y la Cambra del Llibre de Catalunya han decidido hacer de la necesidad virtud, organizando diversas actividades en tiempo vacacional dirigidas a ayudarnos en la selección del libro que deseamos. La sensación es de buenos augurios porque las ventas crecen, lentas pero seguras, muy probablemente un 2% -equiparándose a las del año pasado- y eso en un sector como el editorial que las ha pasado de todos los colores es esperanzador. “Partimos de unas facturación de 22 millones de euros gracias a un millón y medio de ejemplares,  lo que es una venta altísima, así que todo lo que se aumente este año irá por añadidura”, valora el presidente de la Cambra del Llibre, Patrici Tixis.   No tendremos entonces el 10% de descuento preceptivo de la diada, pero sí quizá un opcional 5%.

El hecho diferencial del Sant Jordi 2019 tiene acento porteño, aunque en las calles de Barcelona apenas se notará, y augura un maridaje que, de momento, se concreta en la celebración de Sant Jordi el próximo día 20 en Buenos Aires, una fecha previa a la de la inauguración de la Feria Internacional del Libro (FIL) de la capital argentina el 25 de abril en la que Barcelona será la ciudad invitada. Así, se intentará que estas sinergias faciliten que la ‘diada’ pueda quedarse allí para siempre. “La directora de la FIL de Buenos Aires visitó hace unos años Barcelona durante esta festividad y se quedó muy impresionada, por lo que ahora se ha convertido en su mejor embajadora”, explica M. Carme Ferrer, presidenta del Gremi de Llibreters de Catalunya. 

No hay que irse tan lejos para ver que Sant Jordi no es tan solo una festividad barcelonesa. De hecho, la descentralización de la fiesta tiene su mejor representante en la propia Ferrer, al frente de la librería Empúries de Girona –asegura, divertida, que jamás ha estado en Barcelona durante la ‘diada’-. Y es que la Semana Santa previa es vista más como una ampliación, una oportunidad para las ventas, a lo largo del territorio, aprovechando los desplazamientos vacacionales. Así, en Olot, buena parte del 'who’s  who' de las letras catalanas se reunirá anticipadamente el sábado 13 de abril en el marco del Mercat del Ram, con puestos y firmas de libros. Mientras que el sábado de gloria, 20 de abril, habrá iniciativa similares en Girona, Tarragona y Lleida.

Más lugares de paso y de compra

Más lugares de paso y de compra 

Si hay que ponerle algún pero a la fiesta es el de la masificación en unas áreas muy concretas de Barcelona, Paseo de Gràcia y Rambla de Catalunya, que son y seguirán siendo su corazón. Para paliar el agobio, el Ayuntamiento de Barcelona, ampliará la zona de paso y los puestos por la calle Córcega, entre los dos paseos, que se sumará a la ampliación que ya tuvo lugar el año pasado por Consell de Cent. 

Los interrogantes sobre si la gente se animará a salir a la calle tras un largo puente o si el buen tiempo respetará o no la fiesta no parecen preocupar a Tixis. "Incluso en el peor escenario, Sant Jordi siempre va bien. Lo fue incluso un año que cayó en Viernes Santo. Hay un dato a tener en cuenta. Venimos de un trimestre que en conjunto se está vendiendo un 2,5% más que el año pasado, cuando el mercado ya se había recuperado del bajón que se produjo en octubre y noviembre del 2017 coincidiendo con los acontecimientos políticos. Además este año tenemos una excelente cosecha".