Equipo Ubuntu: así son los 'geo' de los virus en Catalunya que se entrenan para la próxima pandemia

En el sistema de salud de Catalunya hay un equipo de sanitarios que cada dos meses se entrena para saber exactamente cómo actuar ante la posible (y cada vez más probable) aparición de un virus desconocido o conocido (como el ébola o la fiebre hemorrágica del Congo) pero altamente transmisible y que requiera de un aislamiento extremo. Es el llamado Equipo Ubuntu, del Hospital Clínic de Barcelona, y está formado por más de 50 profesionales (médicos, enfermeras, auxiliares, celadores y personal de limpieza). Ellos son los 'geo' de los virus en Catalunya y cada año reciben entre 10 y 20 sospechas de virus que requieren de un alto nivel de aislamiento. De estos, alrededor de uno al año acaba ingresando. La unidad no ha tenido casos de ébola, pero sí alguna fiebre de Lassa y algún caso de hantavirus. El entrenamiento y el saber cómo actuar ante esta situación son claves para proteger no solo a la población, sino también a ellos mismos.

La enfermera Inma Carmona, coordinadora asistencial del Área de Vigilancia Intensiva (AVI) del Clínic, es la encargada de llevar a cabo estos entrenamientos. El último fue el lunes 7 de abril. "En la actualidad hay una serie de enfermedades catalogadas de alta transmisibilidad, como pueden ser una fiebre hemorrágica, una fiebre Lassa o el ébola. Son muy peligrosos y por eso hay que hacer una asistencia bajo equipos especiales", explica Carmona a EL PERIÓDICO, antes de empezar el entrenamiento. El sanitario debe ser capaz de realizar los mismos procedimientos que hace en la práctica asistencial habitual (como, por ejemplo, una extracción de sangre) con epis y trajes de alta protección. "Esto dificulta nuestro trabajo. Porque, por ejemplo, trabajamos con doble guante, por lo que no tienes la misma sensibilidad a la hora de valorar qué vena es buena para hacer la extracción", resume Carmona.

Los profesionales del Equipo Ubuntu, durante su jornada laboral, realizan las tareas de cualquier otro profesional del Clínic. Sin embargo, ellos son quienes están preparados para actuar rápidamente en caso de que llegue un virus peligroso. Hacen guardias en el hospital y ahí pueden detectar a pacientes sospechosos de estar infectados. Automáticamente avisan al resto del equipo y el enfermo es trasladado a la unidad de llegada del paciente, donde hay un box con presión negativa (que sirve para contener los contaminantes y que no se expandan). Ahí, completamente equipados y siguiendo unas medidas de higiene extremas, los sanitarios introducen al paciente en una camilla de aislamiento (donde puede permanecer hasta dos horas mientras los sanitarios realizan pruebas y afinan al máximo la desinfección y limpieza de la zona) para llevarlo a una uci. Es importante entrenarse cada dos meses, explica la enfermera, para "afianzar conceptos" ya adquiridos.

Aquí llego el covid

El primer caso de covid-19 en Catalunya, en febrero de 2020, fue tratado por el Equipo Ubuntu del Clínic. Desde finales de 2019, esta unidad estuvo cribando a pacientes que procedían de China y que tenían síntomas de una enfermedad que entonces infundía más temor que ahora. "Nos suelen llegar, sobre todo, sospechas de fiebre hemorrágica de Crimea-Congo. Un médico de salud internacional del Ubuntu es quien hace la anamnesis [el proceso de recopilación de información sobre el historial médico del paciente] para saber de qué ciudad o país viene y descartar o no si tiene una determinada enfermedad", cuenta Carmona. Los médicos de salud internacional son, además, los que están al tanto de los brotes registrados en otros países.

Como explica Pedro Castro, jefe de Sección del Área de Vigilancia Intensiva del Clínic, el Equipo Ubuntu se creó en 2014 a raíz del primer caso de ébola que hubo en España. Fue en el Hospital La Paz de Madrid, cuando una enfermera se contagió (y casi muere) tras haber atendido a un misionero contagiado en Liberia que finalmente acabó falleciendo. "El ébola es una enfermedad descrita hace mucho tiempo. Siempre ha estado circunscrita a África pero, con la globalización, al haber más viajes, a las ciudades llegan enfermedades que se generan en ambientes rurales", cuenta Castro. Cuando los médicos se dieron cuenta de que un virus como el ébola podía afectar "a todo el mundo", se decidió crear las unidades de alto nivel como Ubuntu en toda Europa. Además del Clínic, en España hay dos en Madrid y también en San Sebastián, Sevilla y Tenerife.

La enfermedad 'equis' es un término que utiliza la Organización Mundial de la Salud (OMS) para referirse a un patógeno desconocido que podría causar una epidemia o pandemia grave. "Sabemos que acabará llegando. Y por eso existen unidades como esta", señala Castro. Al Equipo Ubuntu han llegado sospechas clínicas de infinidad de enfermedades, pero la mayoría de ellas acaban siendo "malarias", enfermedad para la que hay tratamiento.

Nombre de origen zulú

Fue el epidemiólogo del Clínic Antoni Trilla quien puso a esta unidad el nombre de 'ubuntu', palabra de origen zulú y xhosa que significa "yo soy porque nosotros somos" o "humanidad hacia otros". "Viene a resaltar un poco la importancia del trabajo en equipo. Para hacernos una idea, cuando una persona entra a hacer la asistencia, hay otro compañero que vigila lo que está haciendo y que le va indicando si está bien vestido, cómo quitarse el gorro, cómo quitarse las gafas... Hay una confianza en los compañeros", relata Castro.

El celador Guillem Guillaumet forma parte del Equipo Ubuntu. "Para estas situaciones hay que estar preparado. Te va la vida en ello y la de otra gente, por eso hay que estar formados. [La llegada de un virus desconocido] es algo que puede pasar", explica a este diario en el descanso de un entrenamiento. Su compañero también celador, Éric Sabaté, recuerda un día que llegó una sospecha de fiebre hemorrágica de Crimea-Congo. "Te avisan, dejas todo y vas a la unidad. Esto no solo pasa en las películas". Sabaté estaba cuando llegó en febrero de 2020 el primer caso de covid-19 al Clínic. "A las 17 horas supimos que era positivo". Nunca, dice, lo olvidará.

Suscríbete para seguir leyendo