Efectos del fuego en la salud

Los incendios de Los Ángeles agravan las enfermedades respiratorias, como la que sufría David Lynch

Última hora y reacciones a la muerte del director de cine David Lynch

La inhalación de humo de forma prolongada y en grandes cantidades puede causar insuficiencia respiratoria grave en personas con enfisema pulmonar, caso del cineasta fallecido, o bronquitis crónica

Destacado incendio los angeles

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P. M.

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Los incendios devastadores, que provocan una gran cantidad de humo, como los que se han propagado en los últimos días por Los Ángeles, agravan todas las enfermedades respiratorias, pero son especialmente dañinos para las personas que sufren enfisema pulmonar, la patología que padecía David Lynch. El famoso cineasta falleció este jueves a los 78 años, aunque su familia no ha informado de las causas de su muerte. No obstante, el pasado agosto el propio Lynch, fumador durante años, reveló que tenía enfisema y que no podía abandonar su casa por miedo a contagiarse de covid.

Sin embargo, en los últimos días sí que tuvo que dejar su hogar, debido a que fue evacuado de su casa el pasado 9 de enero, cerca de Canyon Boulevard, debido a los incendios que asolan Los Ángeles, según informó el 'New York Post'. A falta de conocer si este suceso agravó o no su enfermedad, lo cierto es que el enfisema pulmonar es una de las enfermedades respiratorias que más puede verse afectada por la inhalación de humo de forma prolongada.

El enfisema es una de las dos patologías más comunes que se encuadran en el EPOC, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, que causa dificultades para respirar. Una de las formas principales de EPOC es la bronquitis crónica, que se caracteriza por la aparición de tos prolongada, mocos e infecciones. Y, en segundo lugar, el enfisema implica la destrucción de la pared alveolar y, por tanto, un daño severo que afecta a la vía respiratoria, conduciendo a la obstrucción y a una retención de aire en los pulmones. La causa más común es el consumo de tabaco, especialmente de forma prolongada.

"La inhalación del humo de un incendio grave produce irritación en las vías aéreas e inflama las mucosas y el músculo bronquial y como en el enfisema la vía aérea ya está dañada y endurecida la musculatura, aunque pongas tratamiento, el daño es difícil de revertir y puede que se produzca un broncoespasmo y que se cierre la vía respiratoria", lo que conduce a la muerte, según explica Núria Bruguera, vocal de la Sociedat Catalana de Pneumología (SOCAP) y neumóloga en el hospital Moisès Broggi, de Sant Joan Despí.

También afecta a personas sanas

A su juicio, el enfisema pulmonar, junto con la bronquitis crónica, las dos formas más comunes de EPOC, son las enfermedades que más empeoran con la inhalación de humo y tóxicos. En tercer lugar, se sitúa la fibrosis pulmonar, que causa cicatrices y engrosamiento del tejido que rodea los alvéolos pulmonares, por lo que provoca falta de aire, tos seca, cansancio extremo y dolor muscular o articular. A menos oxígeno, los pacientes con fibrosis pueden padecer más insuficiencia respiratoria.

Pero, además, la inhalación de mucho humo en un incendio puede provocar la aparición de lesiones en personas sanas. Se han descrito, por ejemplo, daños en las vías respiratorias de los bomberos que trabajaron durante el 11 de septiembre (11-S). En ocasiones, el daño es pasajero y desaparece con el tratamiento adecuado pero, en otros casos, el humo puede desencadenar procesos fibróticos y cicatrices crónicas.