Los estragos de la pandemia
Los médicos piden más reducciones de jornada y permisos sin sueldo por el covid
El sindicato Metges de Catalunya advierte de que hay "mucha falta de motivación en el colectivo", lo que aumenta la escasez de profesionales
Beatriz Pérez
Periodista
Responsable del área de sanidad/salud de EL PERIÓDICO DE CATALUNYA desde 2018. Durante este tiempo, entre otras cosas, he hecho el seguimiento de la pandemia de covid-19, el acontecimiento sanitario más relevante de las últimas décadas.
Beatriz Pérez
La pandemia de coronavirus ha traído consigo un aumento, dentro del colectivo médico, de las reducciones de jornada, las excedencias laborales y las peticiones de cambio de lugar de trabajo. Los sanitarios arrastran malestar desde los recortes de hace una década y el covid-19 no ha hecho sino agravar la situación. "Hay mucha falta de motivación. Aun así la mayoría, pese a estar muy mal, no quieren dejar de ser médicos", señala David Arribas, vicesecretario general del sindicato Metges de Catalunya y médico de familia en el centro de atención primaria (CAP) Manso de Barcelona.
Metges de Catalunya publicó hace un mes un estudio, a raíz de una encuesta realizada entre 2.716 facultativos asociados al sindicato, que refleja que el 70% de la profesión padece 'burnout' o síndrome del trabajador quemado. Este se se caracteriza por una sensación de fatiga importante, mucha desmotivación y una extraña sensación de despersonalización. A nivel práctico, el que lo sufre siente mucha angustia a consecuencia del estrés ocasionado por su trabajo. "Este estudio pone de relieve lo que ya conocíamos", dice Arribas. La incidencia del 'burnout' es, además, especialmente significativa entre las médicas de la atención primaria.
Arribas explica que es difícil saber cuántos médicos deciden abandonar la profesión porque las administraciones no ofrecen cifras y, además, varía de unas a otras. No es, en todo caso, un fenómeno extendido en España. "Pero sí sabemos que la gran mayoría de las veces se producen tres situaciones. Una, la persona se pide una reducción de jornada -quiere trabajar menos porque, si no, enferma-. Dos, el sanitario se pide una excedencia, un permiso sin sueldo para dejar de trabajar un tiempo. Tres, se están pidiendo muchos cambios de lugar de trabajo", cuenta Arribas. "En el último año y medio, de forma clara, vemos que hay más gente que se pide reducciones, excedencias o cambios".
Según el sindicato, además, está habiendo más profesionales que se "replantean" su profesión, a quienes les gustaría "prejubilarse" o quienes desearían "no prolongar su vida laboral en estas condiciones". "Estamos a las puertas de un colapso sanitario por falta de profesionales", asegura Arribas.
El estudio del sindicato
Además de ese 70% de médicos quemados que revela el estudio del sindicato, un 61,5% padecen un sentimiento de despersonalización ante el trabajo y un 44%, una falta de realización personal. Para Metges de Catalunya detrás de este agotamiento se encuentra la "sobrecarga laboral inabarcable y sostenida de los profesionales", que se sienten "abocados" a prolongar su jornada de trabajo de manera sistemática. Esto, según el sindicato, hace "muy difícil el descanso y la desconexión". Y, además, el "déficit estructural de facultativos y las nefastas condiciones laborales y retributivas" están también en la raíz de este problema.
El estudio de Metges de Catalunya va en la línea de la encuesta 'Repercusiones del covid-19 sobre la salud de los médicos de España', publicada en mayo y realizada por la Fundación Galatea, la Organización Médica Colegial (OMC) y otras entidades con la participación de 4.515 médicos. Según esta encuesta, si ya antes de la pandemia tres de cada 10 médicos confesaba padecer 'bornout', ahora confiesan padecerlo seis de cada 10.
En este contexto, el consumo de tranquilizantes e hipnóticos se ha incrementado entre los profesionales de la medicina. Los toman casi el 30%, frente al 18% antes del virus. Además, un 20% se ha planteado adelantar la jubilación y un 34% ha llegado a barajar la idea de abandonar la profesión.
La investigación revela también que los facultativos duermen menos y peor debido al incremento de trabajo y el estrés que les genera el coronavirus. De hecho un 27% duerme menos de seis horas, un porcentaje que dobla el registrado antes de la pandemia. Asimismo, un 51% confiesa sentirse "sobrepasado" y menos preparado física y emocionalmente ante cada nueva ola y muchos admiten que sus hábitos de vida han empeorado. De hecho, disminuye del 50% al 28% la práctica habitual de actividad física y se incrementa del 4% al 7% la proporción de profesionales que admiten en la encuesta que consumen bastante o mucho alcohol.
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