Carrera hacia la inmunidad
Una enfermera puede vacunar a 200 personas en solo una mañana
El colectivo asegura que tiene capacidad para agilizar el proceso, pero faltan dosis contra el covid
Beatriz Pérez
Periodista
Responsable del área de sanidad/salud de EL PERIÓDICO DE CATALUNYA desde 2018. En este tiempo he podido profundizar en temas de relevancia social y humana, como la pandemia de covid-19, el sistema de salud catalán, los avances médicos o las desigualdades en el acceso a la sanidad. En abril de 2024, gané la primera edición del Premi Salut i Drets Socials del Col.legi de Periodistes de Catalunya (demarcación de Tarragona).
En solo una mañana, una enfermera podría vacunar contra el coronavirus a 200 personas. Lo afirma Diego Ayuso, secretario general del Consejo General de Enfermería de España. Pero, para alcanzar esta cifra, habría que seguir determinados procedimientos que, según él, ya se están llevando a cabo en otros países. Una buena estrategia permitiría adelantar mucho el proceso de vacunación contra el covid-19 en el hipotético caso de que llegara un número masivo de vacunas. Porque ahora, advierten las enfermeras, el problema no son el personal ni los espacios disponibles, sino la falta de vacunas y los retrasos en las entregas, que hacen tambalear el plan de vacunación de los gobiernos de diferentes países.
"El problema que estamos teniendo es la falta de dosis; esto no es un problema de personal o de capacidad del mismo", advierte Ayuso. El colectivo de las enfermeras tiene una gran capacidad para vacunar, como ha demostrado ya en campañas como por ejemplo la de la gripe, durante la cual se ha vacunado a 12 millones de españoles en solo dos meses y únicamente con el personal de los centros de salud.
Así, si llegaran más vacunas, ¿qué se podría hacer para agilizar el proceso, recuperar el tiempo perdido y llegar al verano con el 70% de la población inmunizada, tal y como se ha comprometido el Ministerio de Sanidad? "Lo que hacen países como por ejemplo Israel o Reino Unido, que están a la cabeza de la vacunación", responde Ayuso. "Esos países vacunan en grandes superficies, como polideportivos. Se crean circuitos claros, lo cual permite que el flujo sea ágil", explica. Y apunta a otro aspecto: "Si además contamos con un equipo que se dedica solo a registrar el nombre de los pacientes y la enfermera únicamente hace la mezcla del fármaco y pincha, será todo muy ágil".
Actualmente, las enfermeras se encargan, además de preparar las dosis, de registrar los datos de las personas que se van a vacunar, burocracia que les hace perder tiempo. Esto, por el contrario, podrían hacerlo administrativos técnicos. "Con este procedimiento, una enfermera en una mañana puede vacunar a 200 personas", afirma. Según él, esta estrategia está dando "muy buenos resultados", en otros países. "Y otra cosa que se podría hacer es planificar bien qué personas tienen que ir cada día a vacunarse: no es serio que se vacune alguien que 'pasaba por allí' porque sobraban dosis", añade en alusión a los políticos que se vacunaron saltándose el protocolo.
Vacunar en museos
Desde Catalunya, la enfermera y presidenta de la Associació d'Infermeria Familiar i Comunitària (Aificc), Alba Brugués, coincide con Ayuso en que se podría vacunar a un ritmo mucho más rápido de lo que se está haciendo ahora. "Rotundamente sí", dice. La 'consellera' de Salut de Catalunya, Alba Vergés, defendió el viernes que Catalunya puede vacunar a 150.000 personas al día "cuando tenga las vacunas suficientes". Salut estudia vacunar en museos y empresas. El Ayuntamiento de Barcelona trabaja ya escenarios para ceder espacios al departamento, como hizo con la gripe.
Pero, ahora mismo, "el problema es la llegada de vacunas", insiste Brugués, algo que provoca "incertidumbre" y que hace difícil planificar. "Lo que tengo claro es que, si nos organizamos, en dos o tres meses Catalunya podría vacunar a todo el mundo", asegura. Eso en el caso improbable de que todas las dosis de las diferentes fases llegaran de golpe, algo que es imposible porque el Gobierno va distribuyéndolas equitativamente entre las diferentes comunidades para que vacunar por grupos.
En Catalunya, se han apuntado más de 9.000 enfermeras para vacunar contra el covid-19 y Salut ha formado ya a unas 7.500 para administrar el fármaco. De momento, la primera fase del plan de vacunación (en la que se inmuniza solo a sanitarios y residentes y personal de geriátricos) cumplirá los plazos. Las demás, ya se verá. El miércoles arrancará la segunda fase en Catalunya con la llegada de 31.000 dosis de AstraZeneca, que se pondrán a personal de servicios esenciales.
Liberar la patente
Ayuso también apunta a otro aspecto que podría hacer más rápido el proceso en caso de que hubiera dosis suficientes: los derechos de propiedad intelectual de las vacunas. "Hay voces que piden a las grandes farmacéuticas que tienen estos derechos que liberen la patente para hacer frente a la pandemia. Esto podría ser una vía para abrir la mano a que las vacunas se produzcan por más empresas", dice este enfermero. Y, de paso, también para que lleguen a los países del hemisferio sur, que no están recibiendo el fármaco porque la distribución del mismo entre los países ricos y pobres es muy desigual.
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