Contagios en el transporte sanitario

Los técnicos de ambulancias denuncian la escasez y mala calidad de sus equipos de protección

Mascarillas no aptas en Catalunya, batas en lugar de buzos en Aragón y, en diversos puntos, pantallas faciales compartidas y compras particulares de EPIs por internet

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undefined53013096 madrid 03 04 2020 sociedad coronavirus hospital puerta 201024193536 / DAVID CASTRO

Juan José Fernández

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A 24 euros consiguen en internet los técnicos de ambulancias de diversas ciudades un mono o buzo de protección. Los encontrarían más baratos si los compraran por lotes de 500, pero no se hace aún en un colectivo en el que a la intermitente escasez y variedad de EPIs le acompañan unos salarios bajos. A falta de la mejor protección, la gente del transporte sanitario se busca la vida en Amazon y en ferreterías, sobre todo en el medio rural y a hurtadillas del jefe. El fenómeno es frecuente en Extremadura y Castilla-La Mancha, según las fuentes del sector consultadas.

"Ves llegar a los astronautas de la pública y te da envidia", relata el técnico Walter Álvarez, integrante de la dotación de una ambulancia en Barcelona y sindicalista de USOC. "Astronautas" llama a los operarios equipados con buzo y gafas.

Álvarez refiere así la diferencia que hay entre los EPIs que reciben sus colegas del SEM (Sistema d’Emergències Mèdiques) barcelonés, de la sanidad pública, y los que les dan a los técnicos de las contratas de Transports Sanitaris de Catalunya y otras firmas.

Mascarillas no médicas

Álvarez habla desde Catalunya, uno de los territorios donde están más calientes los conflictos del sector de las ambulancias. La última partida de mascarillas que la firma Transports Sanitaris de Catalunya ha entregado a sus técnicos protagonizará la próxima denuncia ante la Inspección de Trabajo que emane del transporte sanitario.

Redacta la denuncia Vicente Mancebo, técnico de emergencias que trabaja en el Alt Penedès y que tiene ya 13 años de sirenas a la espalda. El motivo: las mascarillas, de origen chino, son FFP2, pero llevan un letrero en su envoltorio: "Non-medical use".

Otras mascarillas que los técnicos de ambulancias de la empresa denunciaron en Girona por no cumplir con criterios de homologación fueron retiradas por a firma... "y aparecieron en Barcelona dos semanas después", cuenta Mancebo. TSC es una marca de Ambuibérica, que a su vez pertenece al consorcio Health Transportation Group (HTG), integrado por dos fondos de capital riesgo. TSC no ha hecho comentarios a EL PERIÓDICO.

Los trajes sucios, en casa

Otra denuncia ha parado recientemente una imprudencia en las contratas privadas de ambulancias de la capital catalana: en varias empresas, el propio técnico era quien debía lavar los trajes de protección en su propia casa. Eso, la ausencia de cribados por PCR y el largo tiempo de uso al que están obligados con las mascarillas son el motivo de una demanda de USOC que el 1 de diciembre se ve en el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya.

El sindicato acusa no solo a diversas empresas, también al Departament de Salut. "Lo consideramos responsable subsidiario; es el contratante de las empresas privadas. Sin protección adecuada, no es solo que llevemos el virus a nuestras familias, es que somos una vía de contagio para el paciente", dice Walter Álvarez.

Normas pensadas para los momentos iniciales de la pandemia, cuando escaseaban las mascarillas, las batas y las pantallas en este país, no han sido cambiadas aún en numerosas contratas del servicio, y las dotaciones de EPIs permanecen a menudo al albur de cada empresa.

Sanción

En Aragón, la Administración, y no ya los sindicatos, ha certificado otra posible vía de contagio del coronavirus a bordo de las ambulancias por falta de una protección adecuada. La constructora Acciona, que gestiona el transporte sanitario de Zaragoza, ha sido objeto de un acta de la Inspección de Trabajo por infracción grave.

El pasado 14 de mayo, Trabajo consideró que, en la fase inicial de la pandemia, los técnicos sanitarios de la empresa tuvieron que reutilizar "más allá de la vida útil prevista" sus mascarillas FFP2. Se usaba 168 horas un material que Sanidad recomienda hoy, en diversos folletos públicos, para solo 48.

Acciona ha alegado en su defensa que ha cumplido el protocolo aragonés de la pandemia. El sábado 28 de marzo, a las ocho de la tarde, la Dirección Operativa de Coordinación Asistencial de Acciona en Aragón envió a sus técnicos de ambulancias un correo interno con instrucciones que emanan del 061 autonómico. El documento, al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO, establece que las mascarillas FFP2 "en caso de ser utilizadas con la pantalla de protección, son válidas para siete turnos de trabajo de 24 horas, o equivalente (total 168 horas de exposición)".

Ese empleo se hizo "sin que se hayan adoptado después de cada uso medidas de esterilización", dice el acta de sanción. La autoridad laboral cree en su sanción que la empresa no puede limitarse a cumplir los protocolos "cuando resultan insuficientes para asegurar dicha protección, y no se ajustan a los requerimientos normativos".

El protocolo no ha cambiado, según fuentes de la empresa, pero ahora, tras la fase dura de la pandemia, los técnicos de sus ambulancias usan las mascarillas a demanda y durante menos tiempo. 

No obstante, pasados cuatro meses de esa sanción, fuentes de la plantilla muestran aún EPIs de mala calidad, endebles, basados en el uso de batas. "La bata es útil bajo techo, en las áreas del hospital cuando el paciente ya está tumbado y estabilizado, pero no te da seguridad en ambiente extrahospitalario. El buzo es lo que más protege en ambulancia. Sustituir el buzo por una bata no es apropiado", dice desde Logroño el técnico de emergencias y delegado de UGT Adrián Zaldívar.

En Zaragoza, además, el protocolo interno marca el uso colectivo, no individual, de las pantallas faciales y los cascos. "Pantallas y cascos son de la ambulancia, no de la persona –explica uno de los técnicos sanitarios consultados-. Cuando acabas, te lo quitas, lo limpias y lo dejas en el coche para otro compañero".

En el correo interno que establece el protocolo, la orden dioce que "el conductor del recurso debe limpiar y desinfectar las pantallas después de cada uso (…) y deben permanecer siempre en la ambulancia".

En La Rioja, las ambulancias de la contrata de Ferrovial también llevan dos pantallas faciales como dotación, pero los técnicos tienen otras. "Nosotros - explica Zaldívar- usamos las que al principio de la pandemia donó otra empresa a todo el personal sanitario de la región".

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