El coronavirus y el factor de riesgo

Ancianos, varones y con enfermedades previas, el perfil del paciente ingresado

La enfermedad se vuelve más peligrosa, y con consecuencias letales, a partir de los 65 años y con dolencias cardiacas, pulmonares, diabetes e, incluso, obesidad

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Un estudio de la Agència de Qualitat i Avaluació Sanitàries de Catalunya (Aqua) revela que la edad, el sexo y la comorbilidad son los principales factores asociados a la hospitalización con un peor pronóstico de los pacientes con coronavirus en Catalunya. Y de esta manera se ha podido hacer un retrato del principal afectado: un anciano varón y con patologías previas.

Este informe ha analizado los principales factores asociados a la hospitalización por esta enfermedad en la población general y, en este sentido, ha evaluado principalmente cuatro aspectos. Uno de los factores determinante es la edad, con una probabilidad tres veces más elevada de hospitalización a partir de los 65 años respecto a las personas de entre 15 y 44 años.

Más hombres que mujeres

Otra causa se basa en presentar una elevada carga de morbilidad. Las personas que presentan patologías previas al coronavirus tienen una probabilidad cinco veces mayor de ser hospitalizadas que la población sana. Entre estos riesgos destacan la obesidad (27%), una enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) (18%), la insuficiencia cardíaca (20%) o los trastornos psiquiátricos (11%). Un tercer factor afecta a los colectivos especialmente vulnerables, como son aquellas personas ingresadas en una residencia asistida o con discapacidad intelectual. Y por último, se indica que los hombres tienen un 55% más de probabilidad de ingresar que las mujeres.

El estudio también ha analizado los principales factores asociados a la muerte intrahospitalaria y uno de ellos es la edad. A partir de los 65 años, la mortalidad se dispara respecto de los pacientes entre 15 y 44 años. Así, los pacientes de 65 a 74 años tienen ocho veces más probabilidad de morir; los de 75 a 84 años, 16 veces y los mayores de 84 hasta 20 veces.

Los pacientes con un nivel de morbilidad previo, entre moderado y alto, tienen de dos a tres veces más probabilidad de morir que las personas con menos afectaciones. Entre las patologías específicas destacan la insuficiencia renal crónica (30%), la insuficiencia cardíaca (26%) o la diabetes (18%). Por sexos, los hombres tienen un 62% más de probabilidades de morir que las mujeres una vez han ingresado. Y, finalmente, un cuarto factor es el de formar parte de colectivos especialmente vulnerables, como son aquellas personas ingresadas en una residencia asistida o con discapacidad intelectual grave.

Los resultados

Atendiendo a estos resultados, el informe especifica que el grupo vulnerable a la hora de ser hospitalizado, sufrir complicaciones e incluso morir abarca a los mayores de 65 años que sufren alguna patología como diabetes, insuficiencia cardíaca, afectaciones pulmonares, obesidad, insuficiencia renal crónica, demencia o trastornos psiquiátricos graves; y finalmente ser los colectivos especialmente vulnerables como las personas con antecedentes de discapacidad intelectual grave y los internos de una residencia asistida.

El estudio concluye que los modelos elaborados permiten poder estratificar la población, pudiendo asignar estos riesgos a escala individual y ser de utilidad en la toma de decisiones tanto de actualidad como en futuros escenarios de rebrote.