Defensa despliega a la UME en ciudades de riesgo

Cerca de trescientos cincuenta efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) se han desplegado esta tarde en algunas ciudades españolas para realizar reconocimientos previos que permitan identificar necesidades, según ha anunciado este domingo el Ministerio de Defensa, pero también con una función disuasoria ante la restricción de movimientos individuales que implica el estado de alarma decretado por la crisis del coronavirus.

Así lo explicaron a EL PERIÓDICO algunos de los participantes en este despliegue, que se realizó tanto en lugares estratégicos sensibles (especialmente en la movilidad) pero también en puntos en los que los militares eran especialmente visibles para reforzar la idea del 'estado de alarma' decretado. Incluso delante de hospitales. Llegado el caso, no se descarta que ayuden también en tareas de desinfección.

Madrid o València fueron algunas de las ciudades en las que se pudo ver a los agentes. La elección se realizó cruzando las zonas donde existe un mayor riesgo de propagación del virus con aquellas en las que la UME tiene desplegados contingentes.

La decisión se ha adoptado en la reunión de coordinación que ha presidido este domingo la ministra Margarita Robles en la sede de su Departamento para estudiar las acciones que liderarán las Fuerzas Armadas en cumplimiento con el decreto de estado de alarma aprobado por el Gobierno.

En la capital valenciana, por ejemplo, el despliegue se realizó en la Estación Joaquín Sorolla, donde llegan los trenes de alta velocidad de Madrid y Barcelona, también en la estación del Norte, en el Puerto y en el aeropuerto. Pero igualmente se desplegó un equipo en la Plaza del Ayuntamiento, un lugar especialmente significativo aunque no estratégico en cuanto a infraestructuras. En Madrid, estuvieron en Atocha, Chamartín o Plaza de Castilla entre otras localizaciones.

En la capital valenciana cada uno de los puntos elegidos se desplegó un equipo de unos cinco miembros. Vehículos tácticos de comunicaciones coordinaron la operación. 

Ataviados con sus uniformes negros, sus boinas amarillas y mascarillas, los militares tenían encomendada una misión disuasoria y no requerían a los transeúntes su destino o la razón por la que estaban en la calle.

Eso sí, hubo bastantes personas que se les acercaron a preguntar por si podían estar allí en las situaciones personales de cada uno. En la plaza del Ayuntamiento hubo incluso quien confundió su vehículo rojo con uno de bomberos creyendo que se disponía a quemar la Falla que aún sigue a medio plantar.

Militares en la reserva

Durante el periodo de estado de alarma las Fuerzas Armadas contarán con un mando único, que será el Jefe de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el general Miguel Ángel Villarroya.

El JEMAD, a través del Mando de Operaciones, integrará las capacidades operativas, sanitarias, logísticas y de infraestructura pertenecientes a la UME, Igesan y la estructura operativa de Ejércitos y la Armada, que pondrá a disposición de las autoridades competentes.

Pero además, el Ministerio de Defensa ha decretado la activación de médicos militares en la reserva y ha dado instrucciones a la farmacia militar para que incremente la elaboración de la solución desinfectante hidroalcohólica, así como otros medicamentos genéricos que fueran necesarios.