Uno de cada diez adultos mayores de 40 años sufre la enfermedad pulmonar obstructiva crónica.

La EPOC, una enfermedad en expansión

El 45% de los fumadores la desarrollan.

TERAPIA PULMONAR Una paciente ejercita los pulmones con un espirómetro de incentivo.

TERAPIA PULMONAR Una paciente ejercita los pulmones con un espirómetro de incentivo.

CARME
ESCALES

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Dificultad para respirar (disnea), expectoración, tos crónica, emisiones de silbidos al respirar, sensación de opresión en la caja torácica y fatiga son los principales síntomas de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), por la cual mueren en España 18.000 personas al año. Se calcula que en el mundo sufren esta enfermedad 210 millones de personas y se prevé que en el 2020 la EPOC sea la tercera causa de muerte.

La intoxicación crónica producida por el abuso del tabaco es el principal factor de riesgo -el 45% de los fumadores la desarrollan- y el mayor estimulador de esta enfermedad pulmonar que el 70% de las personas que la padecen desconocen. «Cuando me la diagnosticaron, yo no tenía ni idea de que existiera», asegura Enrique, un vecino de Barcelona de 64 años. «Me empecé a notar excesivamente cansado, y cada día más, cuando jugaba a fútbol, por ejemplo, una práctica que tuve que dejar porque no podía seguir el ritmo del resto de compañeros», dice. «Los neumólogos me trataban como asmático, hasta que uno de ellos sospechó que lo que tenía era la EPOC y lo confirmó», explica. «Yo fumé de los 17 a los 32. Lo dejé por decisión propia, sin utilizar ningún sustitutivo ni ayuda, solo con voluntad. Si no lo hubiera hecho, hoy no estaría contando esto», puntualiza. «Desde que me diagnosticaron la EPOC huyo del humo del tabaco y la contaminación, llevo una vida lo más sana posible, cuido mi peso para que no agrave mi fatiga y utilizo broncodilatadores y otra medicación. Todos los días procuro hacer la cama, aunque me cueste mucho, media hora de bicicleta y caminar siempre que puedo, para ejercitar los pulmones. El sillón es lo peor. Yo soy muy optimista y creo que todo ello ha ralentizado el deterioro que me pronosticó el médico en el 93, cuando me diagnosticaron», afirma el paciente.

CAMBIO DE VIDA / La prevalencia de la EPOC en España alcanza el 10,2% de la población entre los 40 y los 80 años. «Aunque el paciente esté ya en tratamiento farmacológico, continúa acusando síntomas que condicionan su vida diaria y eso impacta mucho en su estado emocional», apunta María Fortún, doctora en Psicología de la Salud y máster en Psicología Clínica y de la Salud de Atlantis Healthcare España. «Yo vivo con las limitaciones que comporta la EPOC. Nado, subo montañas y llevo una vida normal de pareja, con una capacidad pulmonar inferior al 50%. Para mí, las enfermedades crónicas limitantes son vías de crecimiento personal», asegura Ramon, un exfumador de 54 años. Enseñamos al paciente a convivir con la EPOC y no luchar contra ella, no vivirla como una amenaza o miedo, sino como un reto», indica Fortún. «El apoyo psicológico refuerza el ejercicio del abandono del tabaquismo, pieza clave en la EPOC, un mal hábito que muchos pacientes mantienen a pesar del diagnóstico», señala la psicóloga. «Les enseñamos a manejar la ansiedad y a dominar la habilidad de decir que no cuando alguien les ofrece un cigarro», explica la doctora. «Se calcula que más del 50% de los pacientes con EPOC no siguen su tratamiento tal y como lo ha prescrito el médico», expone María Fortún. «Una parte de mi labor en Atlantis Healthcare -que evalúa, investiga y desarrolla programas de apoyo a pacientes- es estudiar por qué los pacientes no toman su tratamiento e intervenir en ello», declara Fortún, que el pasado 30 de mayo fue ponente en Madrid en una jornada organizada por Novartis sobre el impacto de la sintomatología de la EPOC en la calidad de vida de los pacientes y en la que se presentó un inhalador dual. «Es un dispositivo para administrar una sola vez al día incluso en los casos más graves», explicó el doctor Marc Miravitlles, investigador del Servicio de Neumología del Hospital Universitario Vall d'Hebron. «Cada vez hay más incidencia de enfermedades crónicas como las respiratorias, por el envejecimiento de la población. Se precisa tiempo, dinero, esfuerzo y trabajo multidisciplinar para abordar un mayor conocimiento de estas», dijo el doctor Àlvar Agustí en el debate sobre Medicina respiratoria personalizada en el que la Obra Social La Caixa y Biocatue reunieron a una veintena de expertos en Barcelona, el mes pasado.