Picor de piel en verano: el problema que puedes tener

Estamos viviendo un verano de mucho calor y temperaturas extremas en toda España, algo que a nuestro cuerpo también le pasa factura, por ejemplo a nivel cutáneo. Son meses donde las afecciones dermatológicas aumentan y muchas personas sufren sintomatologías de picores o enrojecimiento de la piel.

Afecciones más comunes

Siempre es conveniente acudir a un especialista si no conocemos la causa por la que nuestra piel se encuentra dañada, pero una de las afecciones más comunes en las épocas estivales es el sarpullido debido al calor, que aparece por el sudor acumulado en las glándulas sudoríparas. Normalmente ocurre en los puntos del cuerpo que sufren roces, como las axilas o la ingle.

Otra de las consecuencias que trae el verano son las quemaduras causadas por el Sol, que a la larga puede llevarnos a contraer un cáncer de piel, porque las quemaduras quedan en nuestro organismo, aunque visiblemente desaparezcan. La protección solar es muy necesaria cuando el astro rey aprieta...

Una picadura de mosquito, medusa o de algún insecto también podría ser el responsable de algunas erupciones que suelen tener más cabida en los meses veraniegos. Debemos tener especial cuidado si estas picaduras evolucionan de forma desfavorable o si trae consigo otros síntomas. Por ejemplo, un mosquito podría transmitirnos el Virus del Nilo.

El agua de la piscina o del mar podría también irritar nuestra piel, y aunque esta última sea muy beneficiosa para nuestro cuerpo, es importante limpiar bien la sal o el cloro después de un baño para evitar irritaciones o erupciones no deseadas.

Cuidar nuestra piel es importante durante todos los meses del año y tenemos que estar atentos a cualquier cambio que esta experimente, pero en los meses de verano hemos de mostrar especial atención.