Inteligencia Artificial contra el cáncer de próstata

La Inteligencia Artificial se ha confirmado como uno de los grandes avances de la última década. Una tecnología que será capaz de incrementar el nivel de casi cualquier disciplina una vez se implemente.

Existen multitud de ejemplos en torno a la medicina y la forma en cómo ha mejorado la IA el rendimiento de sus profesionales y en los últimos días hemos conocido el último. Se trata de una aplicación directa al diagnóstico de cáncer de próstata, causante de cientos de miles de muertes cada año.

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Basándose en la potencialidad de esta tecnología, investigadores del Instituto Karolinska en Suecia han desarrollado una potentísima herramienta de diagnóstico para la detección del cáncer de próstata.

El algoritmo de los expertos suecos puede confirmar si una muestra de tejido tiene o no cáncer y estimar la cantidad de tejido tumoral existente en la biopsia al tiempo que puntúan la gravedad del cáncer. Lo hacen, además, con una precisión similar a la de los expertos que han participado en el análisis.

Y es que, para contrastar los datos, a nivel internacional se ha realizado un programa de validación con más de 1000 profesionales prestigiosos bajo el sobrenombre de PANDA. Gracias a este proceso se ha desarrollado un sistema capaz de clasificar con precisión el cáncer de próstata.

«Solo diez días después del inicio de la investigación se desarrollaron algoritmos capaces de coincidir con los resultados de promedios de los patólogos internacionales (…) y sabemos gracias a PANDA que las competencias pueden acelerar la innovación para resolver problemas específicos en el cuidado de la salud gracias a la ayuda de la Inteligencia Artificial», señala Kimmo Kartasalo, investigador del Departamento de Epidemiología Médica y Bioestadística en el Instituto Karolinska y autor principal del estudio.

Gracias al uso de esta tecnología se podrá acabar con las decisiones inciertas de diagnóstico que hacen que en función del médico a cargo se opte por uno u otro tratamiento, provocando en muchos casos retrasos en el hallazgo de soluciones.

Se empiezan con este análisis las bases para acabar frenando la que se considera en Suecia como uno de los grandes problemas médicos actuales. Y es que allí, en el país donde se ha desarrollado el estudio, el cáncer de próstata es la principal causa de muerte por cáncer.

La investigación y sus resultados han sido publicados en la revista científica Nature Medicine.

Máquinas contra médicos

Cuando la tecnología da estos pasos al frente, una de las grandes preguntas que muchos se hacen es si acabarán por dejar a un lado la labor de los seres humanos.

¿Con este hallazgo es posible pensar que el papel de los patólogos dejará de ser fundamental? La respuesta es contundente: no.

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Esta innovación basada en la Inteligencia Artificial, encargada de tratar las biopsias de cáncer de próstata, ayudará en gran medida a mejorar la calidad del diagnóstico a un coste mucho menor que el actual, pero en ningún caso acabará con la labor que realizan los doctores y doctoras especialistas en la materia.

Se trata, como en muchos otros casos, de dotar de mejores y más productivas herramientas a los profesionales para que desempeñen su trabajo al máximo nivel.

«La idea es que la herramienta funcione como una red de seguridad para evitar que los patólogos pasen por alto algunos casos de cáncer al tiempo que se ayuda a estandarizar la manera en que se realizan las evaluaciones», Lars Egevad, profesor del Departamento de Oncología-Patología del Instituto Karolinska y coautor del estudio.

Además, en un sentido mucho más amplio, esta tecnología puede acabar convirtiéndose en un pilar fundamental en aquellos lugares del mundo en que no existen expertos en esta materia.

El cáncer de próstata en el mundo

Si en el caso de Suecia el cáncer de próstata es la primera causa de muerte por cáncer, en el mundo, se trata del octavo tipo de cáncer que más vidas arrebató en 2020. Concretamente 375.304, muy por debajo del millón ochocientas mil personas que murieron por cáncer de pulmón y el casi millón de personas que fallecieron por cáncer colorrectal.

Los cánceres de hígado, estómago, mama, esófago y páncreas, además de los de cuello de útero y la leucemia, completan la lista de los diez tipos de cánceres con mayor tasa de mortalidad en el mundo, según los registros de 2020.

Una enfermedad que en términos globales acaba con la vida de más de 10 millones de personas cada año en el mundo. Es, el cáncer, teniendo en cuenta las cifras de todos sus tipos, la primera causa de muerte a nivel global. Cualquier herramienta capaz de mejorar la situación de esta pandemia.