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Tres visitas imprescindibles en la bahía de Kotor

La magnífica bahía de Kotor, también conocida como Boka Kotorska, es una de las peculiaridades geográficas más increíbles del sur de Europa

Bahía de Kotor

Bahía de Kotor

Albert Falcó

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El fiordo más meridional del Viejo Continente es un antiguo cañón sumergido, erosionado por el río Bokelj y protegido por las altas montañas de los Alpes Dináricos que custodian impasibles la bahía de Kotor, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. A lo largo de esta ensenada hay varios lugares que bien merecen una visita, aunque debemos destacar tres que son imprescindibles.

Kotor, la amurallada

Es la ciudad que le da nombre a la bahía y uno de los lugares más bonitos que ver en todo el país. A Kotor se puede llegar en barco o bien por carretera, la P1, una vía que une el Parque Nacional de Lovcen con esta población y que regala unas vistas espectaculares de la rada. Kotor bien merece una visita a pie y, sin duda, no hay mejor entrada que la Puerta del Mar, construida durante la dominación veneciana. Cabe recordar que la bahía de Kotor estuvo bajo el influjo de la 'Sereníssima' durante siglos y su legado es más que evidente. En la misma Puerta del Mar está el léon de San Marcos, símbolo de la ciudad de los canales. Una vez entras en la población la Plaza de Armas y su preciosa torre del reloj dan la bienvenida al visitante que se pierde por sus calles empedradas repletas de gatos y se encuentra joyas arquitectónicas como la Catedral de San Trifón, la iglesia de San Nicolás o el curioso templo dedicado a San Lucas. Kotor es una ciudad amurallada –los envites de los otomanos fueron feroces– que tiene un recorrido ascendente hasta alcanzar la Fortaleza de San Juan desde donde se tienen las mejores vistas de la ciudad montenegrina.

Perast, la joya de la bahía

Perast es la joya de la corona de la bahía de Kotor. Esta pequeña villa marinera posee el mejor conjunto de arquitectura barroca del Adriático con impresionantes palacios e iglesias. Uno de los mejores guardados es la vista panorámica de la ensenada desde lo más alto de la iglesia de San Nicolás. Perast está muy cerca de dos pequeñas islas, Sveti Dorde –con un monasterio benedictino del siglo XII– y Gospa od Škrpjela, la única isla artificial en las aguas del Adriático, que completan un entorno que ha seducido con su belleza a artistas, marinos y comerciantes.

Risan, la decana

Este pueblo no es tan monumental como Kotor o Perast, pero se encuentra en uno de los enclaves más bonitos de la rada de Boka. Es conocido por albergar los restos de una villa romana donde destacan unos mosaicos preciosos y muy bien conservados del siglo II. 

Dicen que Risan es la población más antigua de la bahía y en sus alrededores hay testimonios pictóricos en cuevas de la Edad de Bronce, como la de Lipci. Risan es recoleta y se recorre en poco tiempo. La calle Gabela, con adoquines de la época otomana, y las iglesias ortodoxas de San Pedro y San Pablo son algunos de sus mayores atractivos además de las vistas desde su puerto que son, sencillamente, espectaculares.

Un hotel de ensueño: Iberostar Heritage Grand Perast

Uno de los alojamientos más impresionantes de la bahía de Kotor es el Iberostar Heritage Grand Perast, un cinco estrellas único, ubicado en un palacio del siglo XVIII de Perast que ha sido renovado con estilo vanguardista pero conservando su arquitectura original. El hotel pertenece a Iberostar Heritage, el segmento de hoteles con historia de la cadena, compuesto por un conjunto muy singular de establecimientos que aúnan arte, pasado, cultura y belleza. El Iberostar Heritage Grand Perast está ubicado en el mayor palacio de la villa que fue construido por la familia Smekja, una acaudalada estirpe de comerciantes con rango nobiliario. Comenzó a edificarse en el año 1764 utilizándose exclusivamente la piedra de la isla de Korčula. En su entrada se encuentran, todavía hoy, las insignias heráldicas familiares: una mano que sostiene el tallo de una planta con estrellas. La construcción se completó en los años treinta del siglo pasado. El establecimiento se encuentra a tan solo 12 km del casco antiguo de Kotor, a 45 km de Budva y a una hora y media del aeropuerto de Dubrovnik. 

El hotel, con 130 habitaciones, cuenta con una excelente oferta gastronómica y una piscina sobre el mar, unida al Beach Club, además de un muelle privado. Cabe destacar su SPA Sensations con una magnífica piscina interior. El hotel está enfocado a que sus clientes, familias o adultos disfruten del encanto del pasado alojándose en un vanguardista edificio cargado de historia y enmarcado en un entorno natural privilegiado.