REFERÉNDUM DE INDEPENDENCIA

Mandos de Mossos dicen que el 19 y el 20-S de 2017 ayudaron a la Guardia Civil en varios registros

Los testigos de la defensa remarcan que en muchos casos la mediación evitó la acción de los antidisturbios

Registro de la Guardia Civil frente a la empresa Unipost, en Terrassa, el 19 de septiembre del 2017.

Registro de la Guardia Civil frente a la empresa Unipost, en Terrassa, el 19 de septiembre del 2017. / ACN/ NORMA VIDAL

ACN

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Varios mandos de los Mossos d'Esquadra aseguraron este jueves 20 de febrero que, el 19 y 20 de septiembre del 2017, colaboraron en registros de la Guardia Civil en el Vallès para evitar el referéndum. Así, se ofrecieron en todo momento en el instituto armado para controlar las entradas y salidas a los edificios, y los agentes de mediación pudieron evitar la actuación de los antidisturbios en muchos lugares.

La subjefa de la comisaría de Terrassa ha explicado que el 19-S en la sede de Unipost tuvieron que actuar con la ARRO para facilitar la salida de la Guardia Civil. Aunque a primera hora de la mañana el instituto armado rechazó la ayuda, más tarde la volvió a requerir. Había unas 50 personas pacíficas en un lado de la calle y una quincena más radicalizadas al otro. Como el tribunal no llegaba y cada vez había más gente, se activaron: la Policía Local, el área de mediación, la ARRO y agentes de seguridad ciudadana. Durante la mañana se permitió que dos coches no logotipados de la Guardia Civil salieran en contra dirección por donde estaban los concentrados más tranquilos.

El secretario llegó a media de la tarde, cuando ya había unas 300 personas, que impedían su entrada. Cuando se agotaron las vías de mediación y negociación, la moza habló por teléfono directamente con el mayor, Josep Lluís Trapero, que la autorizó a utilizar la fuerza. No es habitual que Trapero hablara con un subjefe de comisaría, pero la agente había sido subordinada directa suya en una anterior destino, relatan desde la ACN.

La ARRO tuvo que arrancar los concentrados uno a uno, después de que se enlazaran por los brazos, y el secretario pudo entrar al cabo de tres horas de llegar, hacia las 19:30 h. Al cabo de tres cuartos de hora tenía que salir y lo hizo custodiado por furgonetas del ARRO que llevaron la comitiva de la Guardia Civil por una calle paralela, donde tuvieron que actuar los antidisturbios para dejar el paso libre.

Activadas las ARRO en Sabadell

El subjefe de la región policial Metropolitana Norte explicó que el 20-S fue a Sabadell a la detención de un cargo de la Generalitat y al registro domiciliario ordenados por el juzgado de instrucción 13 porque el día anterior ya había habido problemas en la sede de la empresa de mensajería Unipost de Terrassa.

Activó las unidades ARRO de orden público, y también había antidisturbios del instituto armado. Había unas 800 personas concentradas y los dos cuerpos conjuntamente hicieron un pasillo para permitir la salida de la comitiva judicial en medio de lanzamientos de objetos, de empujones y patadas. El subjefe de la comisaría de Sabadell y el jefe de seguridad ciudadana de la ciudad han mantenido una versión similar.

Mediación del alcalde de Granollers

El mismo subjefe de la Metropolitana Norte fue a Rubí, pero allí la situación era más tranquila, y esto permitió que él y el ARRO se desplazaran a las Franqueses del Vallès, en el domicilio de Josep Maria Jové. Allí había unas 500 personas con actitud "pacífica y reivindicativa" cerca del domicilio, además de prensa, y cuatro tractores cortaban el paso en la calle principal que daba acceso al domicilio. El jefe de los Mossos de Granollers y las ocho o diez furgonetas del ARRO que llegaron más tarde se pusieron a disposición de la Guardia Civil.

Explicó que no había impedimento para entrar y salir del edificio y el detenido fue introducido sin dificultades en el vehículo de la Guardia Civil. El problema fue que los concentrados se sentaron en el suelo para no dejar pasar los coches. El subjefe de Mossos de la región policial Metropolitana Norte instó a usar la ARRO para echarlos, pero el subjefe de Granollers lo convenció de que utilizaran la mediación antes de que actuaran los antidisturbios.

Este subjefe habló con el alcalde de la localidad que, con un megáfono, pudo convencer a los concentrados para que se levantaran, diciéndoles que los medios de comunicación ya habían recogido la protesta y no podían hacer mucho más. Sólo se quedaron en tierra cuatro o cinco miembros de la CUP, que tardaron dos o tres minutos más en levantarse, sin que tuviera que intervenir la ARRO.

Más declaraciones previstas

Por su parte, el jefe de la comisaría de Caldes de Montbui ha explicado que el 20-S ayudó la Guardia Civil en el registro de una nave industrial en Bigues i Riells, donde se encontraron millones de papeletas de votación para al 1-O. La Guardia Civil no podía salir por culpa de una sentada de unas 40 o 50 personas a ambos lados de la calle. Con la ayuda del alcalde y después de mediar, los concentrados se levantaron y dejaron pasar la comitiva policial entre gritos.

Para la próxima semana, que inicialmente no estaba previsto que hubiera juicio, se prevé el interrogatorio de varios Mossos d’Esquadra que intervinieron el 20-S en Economía, como el jefe de la Brimo, además de dos mandos de la Guardia Civil responsables de los registros de aquel día.

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