MEDIOAMBIENTE

Generalitat y Ayuntamiento discrepan sobre la necesidad de un estudio ambiental para activar un vertedero en Rubí

Manifestación contra la apertura del vertedero de Can Balasc en Rubí.

Manifestación contra la apertura del vertedero de Can Balasc en Rubí. / ANNA MAS

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El Ayuntamiento de Rubí ha analizado la autorización ambiental a Arrins, empresa filial del Grupo Sánchez, en relación a la actividad de depósito controlado de residuos no peligrosos en Can Balasc, emitida por la Dirección General de Calidad Ambiental (DGCA) de la Generalitat de Catalunya, así como las <strong>respuestas</strong> que el organismo hace respecto a las <strong>alegaciones presentadas</strong>

La Generalitat, que ha dado luz verde al plan, no considera necesario el estudio de impacto ambiental ya que el proyecto, datado del 1994, ya dispone de licencia de apertura (otorgada en 2012), motivo por el cual considera que la actividad se podría iniciar solo con la autorización otorgada. 

El consistorio, por su parte, considera que "la resolución emitida no se ajusta a derecho y que se siguen vulnerando intereses generales, como el de la protección del medioambiente y la salud". En consecuencia, explican, están estudiando las "actuaciones a emprender" que, aclaran, "en todo caso, llevarán a agotar todas las vías administrativas y judiciales". 

El gobierno local se reafirma en sus consideraciones, como la necesidad de proporcionar un estudio de impacto ambiental, motivo por el que se denegó el proyecto de actuaciones específicas en suelo no urbanizable de Can Balasc, y cree que las respuestas a las alegaciones "no aportan nuevas razones para renunciar a esta exigencia, por lo que no cambia su posición". 

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