Ana María Martínez: "Hay que conseguir una reforma de la Constitución que reconozca a Catalunya como nación"

-Rubí será la única gran ciudad catalana que el día 6 celebrará un acto en conmemoración del aniversario de la Constitución. ¿De dónde surge la idea de celebrar este acto, que ya tuvo lugar el año pasado?

-Es una actividad que pretende conmemorar el ordenamiento jurídico -me gusta decir- que nos hizo libres. Y que supuso un amplio consenso de los políticos de cuatro décadas atrás, los cuales supieron  establecer un sistema por el cual, en vez de separar, lo que se hacía era trabajar la unión. No presentamos este acto, y menos por el momento en que nos encontramos, con ninguna otra intencionalidad.

-En 1978 la Constitución fue un punto de encuentro entre los catalanes, que la votaron masivamente, pero no está claro que ahora sea un elemento que congregue a la mayoría.

-La Constitución tendría que ser un punto de partida hacia una nueva etapa, hacia un escenario donde no se incremente más la frustración en Catalunya y que nos permita hablar del futuro con esperanza, porque el escenario actual no es bueno para nadie. Para nadie.

-¿Eso es lo que expresará en su discurso del acto del miércoles?

-Eso, y la necesidad de reformarla y actualizarla. De la misma forma que en aquel momento generó un escenario de libertad, ahora hay que renovarla a la luz de los nuevos tiempos. Obviamente, la Constitución no es ahora un elemento jurídico adaptado; tenemos que trabajar para que lo sea.

-¿Qué tendría que incluirse en esa reforma de la Constitución?

-Habría que encontrar el punto de encuentro entre diferentes. Hay que tener claro que la Constitución no se adaptará para los que quieren la independencia, pero sí debemos dejar claro que nosotros planteamos Catalunya como una nación dentro de un Estado plurinacional y tenemos que conseguir que la Carta Magna lo recoja. Y que lo haga de una forma que sea satisfactoria para el conjunto de catalanes y catalanas. Insisto: no lo será para aquellos cuyo único planteamiento sea la independencia. Que implante un sistema de corte federal, que es el que nosotros venimos planteando desde hace mucho tiempo y que cada vez se hace más necesario, visto dónde estamos.

-El año pasado hubo incidentes delante del ayuntamiento, en una jornada como esta, incluida la quema de un ejemplar de la Constitución. ¿No le da miedo que se repita algún altercado?

-Fue un grupo de personas, muy reducido, que no mesuraron -quiero creer que no supieron mesurar- el alcance de sus acciones. Cuando se defiende la democracia, hay que ser muy respetuoso con los otros. En este sentido, debo decir que ni mi equipo ni yo hemos recibido el mismo respeto que hemos ofrecido nosotros hacia aquellas personas que no piensan como nosotros y que defienden otros planteamientos. Sí, siento una cierta incomodidad, claro, pero las cosas se hacen por convicción y porque creemos necesario hacerlas, no por comodidad o incomodidad. Tampoco fue cómoda la situación que se creó durante la última Diada aquí en Rubí, pero el año que viene volveremos a hacerlo porque debemos y queremos celebrar también el Onze de Setembre.