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Fiestas 'swinger'

Así son las orgías a lo 'Eyes Wide Shut' de Kubrick en Barcelona

Ānanda Society reúne a decenas de parejas liberales en el Montseny para recrear estas orgías de película, ofreciendo una experiencia erótica como la que encandiló al personaje de Tom Cruise

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Encuentro swinger de película en una masía del Montseny.

Encuentro swinger de película en una masía del Montseny. / Montse Soler

Abel Cobos

Abel Cobos

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Todos ataviados en densas túnicas negras, cubriendo sus rostros con máscaras y capuchas. Disfrazados de incógnito, hacen un círculo. En el centro del grupo, empieza un ritual: una figura oculta bajo una capa roja, escondiendo su cara tras otra máscara, dándole tumbos a un incensario. A su alrededor, un círculo de mujeres en ‘top-less’, con poco más que máscaras y tocados de plumas cubriéndolas, se pasan en cadena, al ritmo de una percusión con bastones, un beso. Tras el ritual, estas mujeres seleccionan a uno de los encapuchados y se lo llevan, escaleras arriba, hacia una zona más privada.

Máscaras y a lo 'Eyes Wide Shut'.

Ritual con máscaras a lo 'Eyes Wide Shut'. / Montse Soler

Sí, es la escena más mítica de ‘Eyes Wide Shut’, de Kubrick. Tom Cruise se cuela en una orgía teatralizada y se deleita la vista entre disfraces, decoración ostentosa y sexo en público. Pero este ritual erótico no solo queda en la ficción. El fin de semana pasado, el club liberal Ānanda Society lo recreó íntegramente −disfraces, ceremonias y ambientación incluida− en una masía del Montseny.

Encuentro swinger de película en una masía del Montseny.

Otro momento del evento de Ānanda Society. / Montse Soler

Se trataba de la segunda edición de este evento. En 2024, cuando tuvo lugar la primera, se realizó en una discoteca liberal, lo cual limitó la ambientación: “La gente llegaba, se pedía una bebida en la barra, entonces se veían las caras, socializaban… se perdía el misterio. Este año, al no apostar por un club e irnos a las afueras fue mucho más inmersivo. Además, nadie se pudo quitar el disfraz hasta finalizado el ritual, así que se mantuvo el suspense hasta que empezaron los juegos”, cuenta Bruno, organizador del evento.

Túnicas y máscaras

El evento empezaba como en la película, en una gran casa rodeada de naturaleza a las afueras. Tras aparcar, "los asistentes entraban a cara descubierta, daban la contraseña, que era su número identificativo en la lista de invitados, y se cubrían con la túnica y la máscara. A medida que entraban en el salón, se distribuían en círculo, esperando que empezase el ritual iniciático. Queríamos que todo se sintiera como en la película. Incluso el maestro de ceremonias, el que viste de rojo, llevaba una réplica de la máscara de Kubrick”, describe Bruno.

Las mujeres que formaron parte del círculo inicial, es decir, las protagonistas de la coreografía erótica que servía de pistoletazo, eran o bien miembros del equipo de Ānanda Society o bien asistentes que se ofrecieron voluntarias. Una vez acababa el ritual, escogían a su pareja para salir de la sala. El resto de las mujeres que no participaban en este círculo inicial, miraban desde fuera con la túnica negra y la máscara, como en la película.

Encuentro swinger de película en una masía del Montseny.

Dos enmascarados interactúan durante el encuentro swinger. / Montse Soler

Una vez finalizada la ceremonia inaugural, se abría la barra, se ponía música y se habilitaban zonas para socializar. Era hora de eliminar la atmósfera de silencio que reinaba durante el ritual porque, ante todo, Ānanda Society es un club social. Eso sí, recuerda Bruno, “durante toda la noche, en las zonas de juegos había muchas escenas como en la película”. Detalla habitaciones con gente con máscara haciendo de ‘voyeur’ a parejas teniendo relaciones, zonas con sexo en grupo, otras zonas más reservadas… Muchas estampas similares por las que se paseaba Tom Cruise en ‘Eyes Wide Shut’.

Entre 180 y 300 euros

Bruno cataloga el evento de gran éxito y de mejoría respecto a la primera edición. También, confiesa, hubo mucho trabajo detrás: se hicieron ensayos para coreografiarlo bien y hasta se invitó a una directora de cine erótico para grabarlo y dirigirlo (de hecho, fue su pareja quien se escondía tras la túnica roja del maestro de ceremonias). Al final, Ānanda Society nace con el objetivo de ofrecer experiencias de lujo a grupos selectos, por eso el precio oscilaba entre los 180 y los 300 euros.

El próximo ‘Eyes Wide Shut’ todavía no tiene fecha, aunque avanzan que quieren hacerlo, como mínimo, una vez al año. Eso sí, no tienen la agenda vacía. El próximo evento liberal será el 8 de noviembre, en Madrid. En su Instagram irán colgando los próximos imperdibles para los adeptos de la cultura ‘swinger’.

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