Toma pan y moja

Menús degustación para la cuesta de enero

Sí, en Barcelona existen menús degustación compatibles con los estragos de enero. Descubre los restaurantes con mejor calidad-precio

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El tartar de solomillo de vaca de Imprevisto.

El tartar de solomillo de vaca de Imprevisto. / Instagram

Òscar Broc

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La cuesta de enero pasa por su mejor momento. Hay que ser cauto a la hora de pasear la tarjeta. Hay que ajustar el punto de mira. Pero eso no significa que debas prescindir de tu cita mensual con el menú degustación. Afortunadamente, en Barcelona existen menús degustación compatibles con los estragos de enero, vaya que si te apetece darte el capricho no tendrás que llamar a Cofidis. 

La familia Contracorrent (Sant Domènec, 14-16) ha crecido y ha dado a luz un nuevo espacio en Gràcia que apuesta firmemente por el menú degustación. Tanto que, si se despista, lo democratiza. El menú corto está por debajo de los 35 € y el largo marca 45 €. Y el desfile de bocados es sorprendentemente abundante dados los precios. Encima, la cocina y los vinos de esta casa catalano-italiana son espectaculares. Recuerdo una espuma de taleggio con puntarelle y garum de anchoa potentísima. Un mollete de carrillera ibérica explosivo. Y sin necesidad de empeñar el diente de oro del abuelo. 

El mollete, el 'arancino' y los vegetales con espuma de taleggio de Contracorrent Bistró.

El mollete, el 'arancino' y los vegetales con espuma de taleggio de Contracorrent Bistró. / Jordi Otix

Por debajo de los 60 pavos juega el restaurante Sintonia (Rosselló, 249). Su menú degustación está en los 55 € y no es ningún juego de niños, pues te ofrecen seis señores platos, en los que encontrarás ostras, pescado o cochinillo, entre otras lindezas. Ah, y un postre que vale su peso en oro: el mini cruasán ahumado

El restaurante Imprevisto (Bailèn, 104) también es conocido por la extraordinaria relación calidad-precio de sus menús degustación, a mi modo de ver, uno de los más disfrutables de Barcelona. Con el corto vas más que servido: por 60 €, accederás a una fiesta de 7 pasos, marcada por la estacionalidad del producto, con elaboraciones de alta cocina muy seductoras. Y si te sobra el dinero, dale duro a la opción de maridaje: el sumiller es estratosférico. 

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