El Empordanet, entre playas y arrozales

Entre el espectacular macizo del Montgrí, que corona la comarca del Baix Empordà y la llanura fluvial del Ter se extiende el Parc Natural del Montgrí, les Illes Medes i el Baix Ter. Se trata de una superficie de gran interés natural y cultural que nació para proteger la riqueza de la fauna y la flora de un territorio que comprende Torroella de Montgrí, L’Estartit, Pals, Bellcaire d’Empordà, Palau-sator, Ullà, Fontanilles, Gualta y L’Escala. Si nos adentramos en el parque podremos admirar unos paisajes excepcionales de gran belleza donde los acantilados, las calas, las cuevas, la montaña y los prados se van intercalando. También es una zona de cultivos, básicamente de arroz y árboles frutales. Se merece una visita ahora que nos encontramos en plena primavera.  Este territorio da continuidad entre el Alt y el Baix Empordà. Es lo que muchos denominan el Empordanet. Otro de sus grandes atractivos son las islas Medes, delante mismo de L’Estartit. También estos islotes marinos están protegidos dada la gran riqueza de fauna y flora de su fondo marino.

Vestigios paleolíticos

Desde el territorio se destaca también que «en relación a la ocupación humana, el macizo del Montgrí constituye una de las zonas de ocupación más antiguas de Catalunya, puesto que se han encontrado vestigios y restos ya del paleolítico inferior, de ahora hace unos 300.000 años, entre los que destaca la gran cavidad de la cueva Cau del Duc, encima mismo de Torroella de Montgrí, desde donde, sin duda, los primitivos pobladores tenían un buen control visual». A lo largo de toda la superficie del parque, se despliega una red de caminos e itinerarios que se pueden completar sin excesiva dificultad. Por ejemplo, una ruta de carácter familiar es la que va desde la playa de Pals, que ocupa una gran extensión, hasta las Illes Medes cruzando zonas de pequeños riachuelos y, sobre todo, campos de arroz. El arroz de Pals disfruta de un gran reconocimiento culinario puesto que presenta unas características muy especiales.

Si opta por la bicicleta, se puede escoger una ruta totalmente llana que se cruza también campos de cereales y frutales, y especialmente por lugares donde todavía se conservan algunas torres de defensa que servían para alertar de la presencia de piratas. También para hacer en bicicleta y con toda la familia proponen la ruta de Les Maures que pasa por la zona de L’Estartit con tramos donde se puede contemplar desde diferentes lados tanto el Alt como el Baix Empordà.