Toma Pan y Moja

Churros con callos: los churros más virales y locos de Barcelona

Locales imprescindibles de la ciudad que innovan en formatos y difusión

Una ración de los churros modernos de Artchur

Una ración de los churros modernos de Artchur / Òscar Broc

Òscar Broc

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Los churros nunca se fueron. Siempre han estado ahí, alimentando a fiesteros y familias de bien, dando vidilla al barrio. Pero los churros, como tantos otros dulces populares, también han pasado por el quirófano de la viralidad, y algunos han apostado por cirugías radicales, como es el caso de Artchur (Muntaner, 61), un espacio que se cruzó por casualidad en mi camino y cuyo lema despertó mi curiosidad: churros gastronómicos.

Entro en una nave limpia que apuesta por el formato take away y gasta look de cafetería-heladería moderna. Su fórmula es curiosa. En un bol te ponen cuatro churros de tamaño medio-pequeño (están ricos) y los ingredientes de cada propuesta, que suelen incluir helado y espuma. El Sexy Pistacho, por ejemplo, lleva, aparte de los churros, espuma, praliné, helado y granillos de pistacho. El de crema catalana combina espuma de crema, caramelo líquido, helado de caramelo y más sorpresas.

No obstante, en los salados es donde salta la sorpresa. Aunque cueste creerlo, en Artchur venden churros con callos a la madrileña. Me aseguran que aquí no hay espumas que valgan, que echan callos de verdad, y me pellizco varias veces el brazo. Por haber, hay hasta unos Mac&Chur con cheddar, bacon, parmesano y pimentón, que también palpitan en la pizarra como una alucinación.

Los churros quieren ser virales y en La Selecta de Churros (Pl. Sagrada Família, 26) también lo saben. Por eso, han sumado tradición y creatividad para dar a luz unas piezas de colores vivos y sabores instagramers a más no poder. Las navidades pasadas pasé por allí y casi me arden las retinas: churros de pistacho, de Oreo, de Kinder Bueno, el paraíso del goloso.

Y si no te convencen ni los churros gastronómicos ni los churros locos, siempre tendrás el comodín de la llamada al churrero tiktoker de Barcelona. En la churrería J. Alpuente (Padilla, 161) encontrarás el equilibrio perfecto entre calidad y descaro viral. Selfies con azúcar.

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