En busca de calas secretas

Los conocemos como caminos de ronda y nos permiten recorrer el litoral de Girona y descubrir las calas más secretas y recónditas. En su tiempo fueron los caminos que servían de refugio de los contrabandistas para poder pasar desapercibidos. Los caminos de ronda son actualmente una magnífica propuesta para hacer pequeñas rutas e itinerarios a pie, contemplar el mar desde tierra y disfrutar de bellos atardeceres sobre el Mediterráneo.

El Patronat Costa Brava-Pirineu recoge con detalle en su web todas las propuestas y caminos de ronda. Como dice la célebre canción de Sopa de Cabra y adaptándola en este caso a la extensión geográfica que hoy nos ocupa: «Entre Blanes y Cadaqués» se extiende todo un itinerario de caminos de ronda que se adaptan a todas las condiciones físicas. Se puede dar desde un simple paseo hasta recorrer una ruta de varios días por etapas. Los tramos de los caminos se encuentran, a excepción de algunos puntos, en muy buen estado. Además, están protegidos en las zonas donde los acantilados típicos de la Costa Brava son más acentuados. No obstante, siempre hace falta extremar la precaución y no salirnos de las zonas perfectamente señalizadas. 

En la web del Patronat Costa Brava-Pirineu se explica por dónde pasan los caminos y se detalla textualmente que estas rutas se pueden descubrir «precisamente poniéndose en la piel de los auténticos contrabandistas, que en el siglo pasado se conocían todos los rincones de este itinerario y que tenían escondrijos en lugares emblemáticos de la Costa Brava para hacer su particular intercambio de mercancías». Además, la web añade curiosidades como que entre Begur y Palamós, por ejemplo, se puede ver «la cala del Port de Esclanyà, el chalet de Sa Perica en Tamariu, la cueva del Tabac, la cala del Cau, la cala dels Frares situada a los pies del acantilado del cabo de Sant Sebastià y la playa del Golfet», entre otros muchos atractivos. Por el Alt Empordà se extiende también una ruta de caminos y en la comarca de la Selva, en la parte de la costa, se pueden seguir buenos itinerarios por Tossa de Mar, Lloret de Mar y Blanes, por poner algunos ejemplos. 

Las rutas se pueden completar en cualquier época del año. Y, como recomendamos siempre, debemos escoger la ruta o itinerario del camino que más se adapte a nuestras condiciones físicas, llevar agua y comida –si el trayecto es largo o por etapas– y seguir las indicaciones de los caminos.