Los Comuns dejan la puerta abierta al regreso de Colau en la reforma de su código ético

Tras haber dejado la primera línea de la política hace justo un año, Ada Colau ha dejado claro que no entra dentro de sus planes volver a ser candidata a la alcaldía en las elecciones municipales de 2027. Partiendo de esta premisa, los Comuns han esbozado una hoja de ruta para relevar lo que reconocen que ha sido un "hiperliderazgo" de la exalcaldesa. Sin embargo, el espacio político no quiere dar por cerrada la puerta a un eventual regreso. Prueba de ello la actualización del código ético que se someterá a votación este sábado.

En ese texto, según fuentes de la dirección de Barcelona en Comú, la referencia a la limitación de los tres mandatos (dos más uno extraordinario) que se fijó en la fundación de la formación será substituida por un tiempo máximo de 12 años en cargos institucionales. El contador, aseguran, "no se pondrá a cero" para los dirigentes que han sido ya concejales. Colau se ha presentado tres veces como cabeza de lista (2025, 2019 y 2023), pero formalmente ha consumido nueve años y medio en el Ayuntamiento, con lo que aún tendría más de dos años por delante de margen si reconsiderara la posibilidad de volver a disputar la Alcaldía. Así que presentarse podría, pero la incógnita está en si podría o no acabar el mandato. En todo caso, fuentes próximas a la exalcaldesa descartan que se plantee ese movimiento.

Durante el plenario también se prevé la modificación del actual tope de salario a 2.200 euros y se reemplazará por una fórmula que permita que la limitación de las retribuciones, que se mantendrá, se vaya actualizando con el tiempo sin necesidad de tener que modificar de nuevo el código ético.

El tándem de las primarias

La militancia de Barcelona en Comú está en plena ebullición desde que en el congreso del pasado mes de julio, el primero que celebró el partido en su década de existencia, se decidió que se abriría un proceso de primarias en el que se elegiría a un tándem para concurrir a las elecciones de 2027. Pero el debate se ha abierto más aún en canal desde que la actual líder del grupo municipal, Janet Sanz, anunció a finales de septiembre que deja la política y dos nombres han saltado a la palestra como aspirantes a candidatos: el del diputado en el Congreso Gerardo Pisarello, que no se ha postulado personalmente pero a quien aúpa una parte significativa del espacio, y el del comunicador Bob Pop, cuya intención de presentarse a las primarias ha pillado por sorpresa incluso a la dirección del partido.

Ante estas dos ofertas, desde Barcelona en Comú recuerdan que lo que pretenden es transitar hacia un "liderazgo más cooperativo" y que la fórmula del tándem requiere que nadie pueda presentarse en solitario y que como mínimo debe haber una mujer. En el caso de Pisarello, el nombre que se maneja para concurrir junto a él es el de la concejal Gemma Tarafa, que también ejerce de coordinadora de Catalunya en Comú. Ambos son personas de la confianza de Colau y tienen experiencia en el ayuntamiento -cuatro años Pisarello en el primer mandato de los Comuns y seis Tarafa, desde 2019-, por lo que esa trayectoria se restaría de la limitación de 12 años.

El reglamento de las primarias se aprobará en el plenario de Barcelona en Comú de diciembre, un acto que dará el pistoletazo de salida a un proceso que culminará sobre el mes de febrero, pese a que aún no se ha formalizado el calendario definitivo. Lo que sí que anticipan es que se podrá presentar "cualquier activista o simpatizante" del espacio y que quien esté dispuesto a dar el paso deberá también representar la "hipótesis política" que decida el partido.

La complejidad del "frente amplio"

¿Qué significa eso? La lectura que hace la dirección de Barcelona en Comú es que el proyecto con el que ganaron las elecciones de 2015 "está agotado" y que eso les obliga a hacer cambios para volver a ser un "espacio ganador". Su apuesta, ratificada por el congreso de julio, es la del "frente amplio" con otros partidos de izquierdas y movimientos sociales de la ciudad. "Antes de lanzarnos a la búsqueda del candidato debemos tener claro con quién queremos pactar y si eso quiere decir coalición electoral o no", anticipan.

Presentarse en coalición supondría rizar el rizo, puesto que obligaría a decidir cómo se integra el tándem que escoja la militancia de los Comuns, así como el resto de la lista, con los candidatos de otros partidos. Dan por sentado, eso sí, que sería a ellos a quien les tocaría liderar la candidatura. "Tenemos 9 concejales y 131.000 votos", recuerdan.

Suscríbete para seguir leyendo