Audios contra la UCO

Aldama sabotea la declaración de Leire Díez y acaba a las manos con Pérez Dolset

La comparecencia de la exmilitante socialista acaba deriva en espectáculo caótico con insultos, empujones y el cabecilla de la ‘trama Koldo’ y el empresario investigado como protagonistas

Víctor de Aldama y Javier Pérez Dolset, llegan a las manos este miércoles tras la comparecencia de Leire Díez.

Víctor de Aldama y Javier Pérez Dolset, llegan a las manos este miércoles tras la comparecencia de Leire Díez. / Chema Moya / Efe

Juan Ruiz Sierra

Juan Ruiz Sierra

Madrid
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Víctor de Aldama, presunto cabecilla del ‘caso Koldo’, se ha acercado este miércoles al hotel Novotel, en Madrid, con un objetivo bien definido: reventar la comparecencia de Leire Díez. Lo ha conseguido a medias. El comisionista de la trama diseñada para amañar contratos públicos en el Ministerio de Transportes, quien lleva meses acusando a dirigentes socialistas como Santos Cerdán de recibir sobres de dinero, algo que el secretario de Organización del PSOE desmiente, ha irrumpido en la sala justo cuando la exmilitante socialista terminaba su declaración sin preguntas. El movimiento ha sido cualquier cosa menos educado. 

“¿Qué tienes contra mí?”, le ha preguntado a Díez. 

La exmilitante socialista, en el ojo del huracán desde que la semana pasada se difundieran unos audios en los que busca material sensible contra la UCO a cambio de beneficios judiciales, no había mencionado a Aldama en ningún momento. Aun así, un día después de que presentara su “baja voluntaria” del PSOE tras dos horas de interrogatorio en Ferraz, Díez se ha levantado de su silla, visiblemente incómoda, y ha dado la comparecencia por finalizada. 

La persecución

Entonces se ha desatado el caos. Aldama ha perseguido a Díez. Las cámaras han perseguido a Aldama y a Díez. Y Javier Pérez Dolset, un empresario que participó en las maniobras contra la UCO y está investigado por desviar 100 millones de dólares a Panamá, ha perseguido a Aldama, a Díez y a las cámaras. 

“¡Esta señora es una sinvergüenza! ¡Que dé la cara, que no la ha dado!”, le ha dicho a Díez el presunto comisionista, imputado por pertenencia a organización criminal, cohecho y blanqueo de capitales, entre otros delitos. 

La exmilitante lo ha ignorado. Con la mirada fija en el suelo, ha intentado salir de allí lo antes posible. Ha sido imposible. Aldama tenía un plan. Ha logrado interceptar a Díez, incluso con contacto físico, y no le ha dejado pasar. 

Pero la protagonista de la caótica comparecencia tenía a su vez a Pérez Dolset como cancerbero. “Ella es mi amiga”, ha dicho el empresario, que ha logrado neutralizar a Aldama. Primero, propinándole un empujón. Después, reteniéndole por la fuerza. 

El encargado de seguridad del hotel se subía por las paredes. “Tranquilo, tranquilo”, le decían. “¡No estoy tranquilo! ¡No puedo estarlo!”, contestaba. Ha terminado llamando a la Policía. La comparecencia ha dado a los agentes más trabajo de lo esperado, porque Díez ha decidido denunciar a Aldama por el sabotaje. 

En la dirección del PSOE, mientras tanto, se tiraban de los pelos ante todo este espectáculo. “No tenemos nada que ver”, han señalado fuentes de la cúpula.