El Govern pacta con ERC una nueva inyección de 1.300 millones y afianza su estabilidad sin presupuestos

El Govern de Salvador Illa está a las puertas de garantizarse la estabilidad -por lo menos hasta la próxima negociación de presupuestos- gracias a un nuevo acuerdo con ERC para inyectar 1.300 millones más de euros a una Generalitat que transita con las cuentas prorrogadas de 2023. La conselleria de Economia, Alícia Romero, ha alcanzado un pacto con los republicanos para disponer de este nuevo montante que servirá para garantizar el incremento salarial de los funcionarios y, también, las ayudas directas a los sectores más afectados por los aranceles impuestos por Trump, así como a los agricultores de Lleida perjudicados por la granizada de hace diez días.

El Govern cede ante ERC y fragmentará la inyección de más recursos para tener estabilidad sin presupuestos

Así pues, el Consell Executiu aprobará este martes el segundo suplemento de crédito de este año tras asumir la imposibilidad de aprobar nuevas cuentas. El primero, hace poco más de un mes, fue de 2.100 millonespara gastos de funcionamiento ordinario y de personal que aún está pendiente de ser convalidado en el pleno de la semana que viene en el Parlament. Eso sí, para apuntalar este segundo paquete falta aún por amarrar la entente con los Comuns, que llevan días insistiendo en que, pese a que ERC ha optado por pactar de forma fragmentada el dinero adicional del que puede disponer la Generalitat, defienden un "acuerdo global" para dar su 'sí'.

El destino del dinero

Los 1.300 millones de este segundo suplemento tienen dos grandes objetivos: algo más de 900 se dedicarán a sostener el aumento del sueldo de los funcionarios de la Generalitat. Es el aumento del 2% aprobado el año pasado y también, a futuro, del 0,5% adicional prometido por el Gobierno de Pedro Sánchez. El resto de recursos del suplemento, 388 millones, se dedicará a hacer frente a la crisis comercial desatada por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. Lo que ha pactado ERC es crear un grupo de trabajo con la Generalitat que decidirá a qué sectores se dedica el dinero. Lo único que se sabe es que serán, fundamentalmente, para el sector agroalimentario y el industrial y que, las empresas que lo reciban, no podrán despedir a trabajadores. Por último, de estos 388 millones, 30 se dedicarán a los agricultores catalanes afectados por las últimas granizadas. Una parte con ayudas directas para paliar las pérdidas y otra para realizar inversiones para prevenir los efectos adversos del cambio climático.

El encargado de defender el acuerdo con el Govern ha sido el vicesecretario de Comunicación de ERC, Isaac Albert. Su argumento ha sido que son unos recursos "al servicio de Catalunya" que servirán para mejorar "la situación del país". También ha admitido que confirma la apuesta de ERC por hacer una oposición constructiva que "tiende la mano" al Govern. La portavoz del PSC, Lluïsa Moret, por su parte, ha asegurado que el acuerdo ha sido posible gracias al "espacio de relación estable y fluido" que se ha tejido con los republicanos.

Las claves del pacto Govern-ERC: aumento salarial a funcionarios, ayudas contra los aranceles y tasa turística

Un tercer suplemento

Pactado el primer y el segundo suplemento de crédito -de 2.100 y de 1.300 millones, respectivamente-, el Govern de Illa aspira a reforzar aún más sus finanzas con un tercer suplemento de otros 470 millones. En este caso el Govern tendrá que volverse a arremangar en la negociación con los republicanos. ERC contempla de nuevo apoyar esta partida, pero primero quiere saber a qué se destinará el dinero. Este lunes no ha dado pistas de cuáles son sus prioridades.

Estos 470 millones, pese a ser una cantidad más pequeña que las otras dos, es crucial porque de ella depende el margen del ejecutivo de Illa para destinar recursos a nuevas medidas más allá de gastos corrientes o de partidas ya comprometidas. En esta segunda ampliación, los Comuns han pedido que se destinen 20 millones a la energética pública para nuevos parques solares y estaciones de carga para vehículos eléctricos, reclamación que ha sido aceptada.

Condicionar el margen de gasto

Pero la lista de peticiones de los Comuns es más amplia porque tratan de condicionar el destino de la partida que está aún en el aire. Sus reivindicaciones van des la creación de la oficina antidesahucios al centenar de inspectores para aplicar el régimen sancionador de la ley de vivienda, así como 13 millones para desplegar el dentista público o que se garanticen 850 millones de euros en recursos propios de la Generalitat a vivienda. La coordinadora del partido, Candela López, ha insistido en que el objetivo que persiguen es que esta sea la partida anual "más cuantiosa" que haya destinado la Generalitat en vivienda pública, puesto que a los 850 millones de recursos propios se sumarían 600 millones más vía crédito. La previsión inicial era que el acuerdo con el Govern se anunciara este mismo lunes por la tarde, pero finalmente la comparecencia ha quedado anulada a causa de la urgencia por gestionar el apagón.

Más allá de estos asuntos, recogidos en el acuerdo de investidura con el PSC, el Govern también necesita este dinero para hacer realidad alguna de sus promesas, como el impulso a la ley de barrios o las ayudas prometidas por el president Illa para el vehículo eléctrico o para cumplir con las inversiones del plan 'Catalunya lidera'. No obstante, habiendo logrado encauzar ya 3.400 millones adicionales, el ejecutivo catalán en minoría del PSC se desbroza el camino de este 2025 a la espera, eso sí, de que se abra este mes de junio la carpeta de la financiación singular.