Presupuestos de 2025

El Govern confía en que Junqueras garantice la estabilidad de la legislatura

Los socialistas dan tiempo a ERC para definir sus interlocutores de la negociación de presupuestos y prevén las reuniones formales para enero

Junqueras y la (in)gobernabilidad de ERC

La Generalitat se ahorrará 250 millones en intereses en 2025 con la condonación de parte del FLA

Illa defiende una "financiación solidaria" ante los presidentes autonómicos

Salvador Illa con Alícia Romero y Miquel Sàmper en el Parlament

Salvador Illa con Alícia Romero y Miquel Sàmper en el Parlament / FERRAN NADEU

Sara González

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Barcelona
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Pies de plomo en el Govern y el PSC tras el regreso de Oriol Junqueras a la presidencia de ERC. Si una cosa quiere evitar el ejecutivo de Salvador Illa es pisar algún callo que suponga empezar con mal pie la relación con la nueva dirección republicana. Así que, aunque aprobar los presupuestos sea el principal objetivo, los socialistas entienden que en la sede de la calle de Calàbria necesitan ahora un cierto margen para recolocarse tras un proceso interno convulso y definir sus interlocutores para estar en condiciones de negociar. Lo que no ponen en duda, ni ante los focos ni detrás de ellos, es que, por más inflación verbal que haya habido en ERC sobre los pactos con el PSC, lograrán mantener la "estabilidad" de la mano de Junqueras.

La primera en apuntar en esta dirección ha sido la consellera de Economia i Finances, Alícia Romero, que ha asegurado que confía en que el hecho de que Junqueras tenga en su currículum haber ejercido ese cargo tiempo atrás "ayude a lograr" un acuerdo para que haya nuevas cuentas en 2025. En una entrevista en Catalunya Ràdio ha asegurado que esa trayectoria le dota de "sensibilidad para saber las dificultades" que supondría no tener presupuestos y mantener prorrogados los de 2023, trámite que el Consell Executiu ejecutará este martes.

Dar margen al socio

Sintonizada con ese argumento, la portavoz del PSC, Lluïsa Moret, ha afirmado estar convencida de que ERC "priorizará dar respuestas a los problemas y retos" que tienen los catalanes y que es una formación que sabe que "lo mejor para Catalunya" es que haya presupuestos, por más que durante las primarias las candidaturas hayan entrado en una espiral 'antiPSC'. La interlocución para entrar en materia, ha asegurado, se establecerá "cuando llegue el momento". Es decir, cuando la nueva dirección de Junqueras se acomode, ponga tierra de por medio a todo lo verbalizado en el marco de la campaña y haga los cambios que tiene en mente, por lo que en el Govern sitúan ya en enero las conversaciones formales.

Los socialistas tienen buena relación con el actual presidente del grupo en el Parlament, Josep Maria Jové, con quien se sentaron para negociar las investiduras de Pedro Sánchez y Salvador Illa. Pero también la tienen con dirigentes de la órbita de Junqueras que están llamados a ganar peso a partir de ahora, como la exconsellera Ester Capella, además de con dirigentes de su estrecha confianza que ahora están en el meollo de Calàbria y con quienes ya han cerrado anteriormente pactos en las diputaciones y el ámbito municipal. Si una cosa se ha procurado Illa es tener vínculos "estables" con los dos sectores republicanos en disputa, relación que quieren mantener dada la división exhibida por el partido y por lo que pueda ser en un futuro.

Contacto entre Illa y Junqueras

El propio president se puso en contacto este mismo fin de semana con Junqueras para felicitarlo por haber sido reelegido al frente de ERC y en el horizonte queda la posibilidad de que se reúnan en las próximas semanas. También los Comuns han hablado ya con el líder republicano para emplazarse a un encuentro que sirva para tejer una "agenda conjunta" de políticas progresistas que marquen la legislatura. Los dos socios prioritarios del Govern buscarán marcar el paso de Illa ahora que han cerrado ya sus respectivos congresos.

Con los Comuns, aunque se han producido reuniones ininterrumpidas y el Govern considera que las negociaciones "avanzan", el camino tampoco está exento de obstáculos. La coordinadora del partido, Candela López, niega la mayor y aseguran que no están "avanzando" por falta de concreciones en carpetas clave que forman parte del acuerdo de investidura, especialmente de asuntos que tienen que ver con la vivienda. "Queremos menos palabras y más hechos", ha espetado.

Los Comuns reclaman un gesto que demuestre que están dispuestos a cumplir todo lo suscrito: que el Govern apruebe ya la puesta en marcha del régimen sancionador para quien incumpla los topes de precios a los alquileres fijados por la ley de vivienda. Y ERC, por boca de Junqueras, insiste en que sin saldar las deudas pendientes no dará su 'sí'. La condonación de la deuda del FLA re-anunciada por Sánchez en la conferencia de presidentes es una de ellas, pero la mayor es la concreción de la financiación singular, cuya concreción, admiten en el Govern, va aún para más largo.