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Puigdemont exige a Sánchez que se someta a una cuestión de confianza

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Puigdemont pedirá a Sánchez que se someta a una cuestión de confianza en el Congreso

Puigdemont pedirá a Sánchez que se someta a una cuestión de confianza en el Congreso / JUNTS / VÍDEO: EFE

Carlota Camps

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Barcelona
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Tras semanas de silencio, el expresident y actual líder de Junts, Carles Puigdemont, ha comparecido este lunes en Bruselas para hacer balance del cumplimiento de los acuerdos alcanzados con el PSOE para la investidura de Pedro Sánchez. A las puertas de la negociación de los Presupuestos Generales del Estado, Puigdemont ha decidido echar un pulso a Pedro Sánchez y le ha exigido que se someta a una cuestión de confianza. "Un año después, las cosas no van bien: o hay un punto de inflexión o mejor dejarlo estar para no hacer perder el tiempo a nadie", ha advertido Puigdemont, que ha asegurado que Junts dio un "crédito" al PSOE y que actualmente está "en números rojos".

Mientras se celebraba la comparecencia, Junts ha registrado una proposición no de ley en el Congreso para instar a Sánchez a usar esta figura jurídica, con la intención de no dejar la petición de su líder solo como una amenaza verbal. El texto podría salir adelante con una mayoría absoluta de PP, Vox, Junts y UPN (178 escaños), pero, de prosperar, no tendría ningún valor jurídico, ya que solo el presidente tiene potestad para convocar una cuestión de confianza y no tiene intención de hacerlo. Sin embargo, sí sería una clara muestra de la debilidad del Gobierno, en un momento clave de la legislatura y sin que el presidente haya podido sacar adelante aún las primeras cuentas públicas del mandato.

Justamente, el movimiento de Puigdemont busca apretar las tuercas al PSOE y pone trabas a la negociación presupuestaria. Junts lleva semanas advirtiendo de que no se sentará a hablar de números si no se han cumplido las cuentas anteriores, algo que Puigdemont ya ha dado por hecho que no se ha dado. "Pensábamos que lo habrían entendido, pero han empeorado y deben repetir curso", ha respondido, tras tachar la liquidación de "catastrófica". "Incluso si [Sánchez] supera la cuestión de confianza, ¿cómo podemos negociar presupuestos con unos incumplidores? No se han ganado esta confianza", ha remachado, alejando el 'sí' de los siete diputados de Junts.

El líder de Junts, Carles Puigdemont, durante la comparecencia en el Press Club de Bruselas

El líder de Junts, Carles Puigdemont, durante la comparecencia en el Press Club de Bruselas / Junts

Aunque el expresident ha tratado de desvincular los presupuestos de la cuestión de confianza, lo cierto es que las cuentas son las únicas arma tangible con la que Junts puede hacer tambalear al Gobierno. La otra sería una moción de censura, pero Junts ya la ha descartado en más de una ocasión. Una cuestión de confianza podría debilitar a Sánchez, pero no dinamitaría el Gobierno. Sí lo haría una moción de censura, pero esta fórmula obliga a la oposición a presentar un candidato alternativo a la presidencia. En este caso, Junts debería ponerse de acuerdo con el PP y sumar sus votos a la extrema derecha de Vox, algo que los posconvergentes ya han tachado anteriormente de "fantasía".

De momento, Puigdemont no ha querido adelantarse a los acontecimientos ni romper todos los puentes, por lo que ha evitado aventurarse sobre qué pasaría si Sánchez rechaza someterse a esta cuestión de confianza. Lo único que ha dicho es que sería de una "grave irresponsabilidad". Tampoco ha verbalizado si debería dimitir o convocar elecciones en caso de celebrarse el debate y perderlo, pero ha dado a entender que, a su parecer, sería lo razonable. "Si la perdiera, le toca a él saber lo que tiene que hacer. Yo sé lo que haría", ha advertido. Puigdemont se sometió a una cuestión de confianza cuando era president de la Generalitat para lograr el apoyo de la CUP a los presupuestos. Fue en aquel debate, celebrado en otoño de 2016, cuando el posconvergente prometió celebrar un referéndum de autodeterminación.

"Sánchez no es de fiar"

Durante la comparecencia celebrada este lunes en el Press Club de Bruselas, donde se ha desplazado la cúpula de Junts para arroparle, Puigdemont ha asegurado que Sánchez no es de "fiar" y ha acusado al PSOE de "dilatar sistemáticamente" los acuerdos. Además, el líder del partido ha denunciado una "descoordinación" entre las cuestiones abordadas en la mesa de negociación con mediador en Suiza y las actuaciones posteriores del Gobierno. También ha asegurado que el discurso de la "normalización" hecho por el president de la Generalitat, Salvador Illa, es una "enmienda a la totalidad" al pacto de Bruselas, que es el término con el que Junts se refiere al acuerdo de investidura. "Si está tan normalizado, ¿de qué sirve seguir negociando?", se ha preguntado.

La cúpula de Junts reunida en Bruselas

La cúpula de Junts reunida en Bruselas / ACN

El expresident también ha aprovechado para recordar algunos de los acuerdos alcanzados con Sánchez que siguen como pendientes, como la oficialidad del catalán en la Unión Europea, que asegura que no se ha cumplido por la falta de "implicación" directa del presidente Sánchez, o el traspaso de las competencias en inmigración. Sobre esta cuestión, que Junts quiere tener atada antes de fin de año, Puigdemont ha insistido en que no se conformará con una "encomienda de gestión" y ha recordado que su propósito es que la Generalitat tenga competencias en cuanto a los permisos de residencia, el control de las fronteras o las órdenes de expulsión.

Puigdemont ha comparecido en el mismo emplazamiento en el que hace siete años dio a conocer su marcha de España tras la declaración unilateral de independencia fallida, y también donde en noviembre del año pasado anunció el acuerdo de investidura. Hacía siete meses que el expresident no ofrecía una rueda de prensa, la última fue la mañana después de las elecciones catalanas, el 13 de mayo. Desde entonces, y especialmente desde su reaparición y fugaz huida el pasado 8 de agosto en Barcelona, sus apariciones públicas se pueden contar con los dedos de una mano.