Congreso de Catalunya en Comú
Colau cede paso en los Comuns con una llamada a volver a los orígenes: "Hay que combatir a las élites"
La exalcaldesa deja el liderazgo del partido en un congreso sin Yolanda Díaz ni Sumar en el que pide "volver a enamorar" para recuperar ayuntamientos como el de Barcelona
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La exalcaldesa Ada Colau con Jéssica Albiach y Candela López en el congreso de los Comuns / TONI ALBIR / EFE


Sara González
Sara GonzálezPeriodista
Periodista especializada en Política. Autora de 'Per raó d'Estat' (Ara Llibres), 'Cas Mercuri. La galàxia Bustos' (Saldonar) y 'El part dels comuns. Relat del naixement de Catalunya en Comú' (Saldonar)
"No olvidemos nunca quiénes somos, de dónde venimos ni por qué estamos aquí". La frase que Ada Colau colgó en la puerta de su despacho en el año 2015 cuando estrenaba el cargo de alcaldesa de Barcelona ha retumbado por todos los recovecos del congreso que este fin de semana celebra Catalunya en Comú. Desde el escenario se recogía veladamente la pregunta que impregna todos los corrillos del partido: ¿Volverá Colau a ser candidata en las municipales de 2027? Hay cierto vértigo ante el relevo de la gran líder que ha tenido el espacio en los últimos nueve años en un momento en el que asumen una pérdida de fuelle electoral y tratan de dar con la tecla para revertirlo.
Ella no ha dado hoy una respuesta explícita en su despedida, de hecho ha dicho que continuará "como una más" en la nueva etapa que abre al frente de la fundación del partido, pero sí que ha cedido paso a una nueva cúpula con una llamada a regresar a los orígenes para "volver a enamorar" a la clase trabajadora y recuperar alcaldías como la de Barcelona: "Tenemos que recuperar los votos para combatir las élites que empobrecen a la población y reforzar los vínculos con los movimientos sociales". Una vuelta a los básicos pese al balance de logros y chascos tras un paso por la alcaldía en el que ha reconocido haber topado con "límites" y "contradicciones".
Un momento "difícil"
Se trata de una invocación a recuperar el carácter irreverente e impugnatorio con el que los Comuns irrumpieron en las instituciones contra pronóstico en la que ha habido nombres propios ausentes: no se ha mencionado ni a Yolanda Díaz y Sumar -hace tres años Colau la definía como "la mejor política de España"- ni a Podemos, con quien la ruptura se da por irreversible. Hay fotografías y proclamas -ni un solo 'sí se puede' de antaño- que han envejecido a la misma velocidad que se amortizaban liderazgos. Colau no ha obviado que son "momentos difíciles" para el partido y para las fuerzas progresistas ante un contexto en el que se abre paso la desafección y la antipolítica.
Han tejido, de hecho, paralelismos con el momento en el que nacieron como formación, pese a que la efervescencia de entonces tras el 15-M dista mucho de la de hoy, en la que es la extrema derecha la que gana terreno. Tras una década de 'procés' y 14 elecciones desde que zarandearon el tablero político hace nueve años, la exalcaldesa ha reivindicado que los Comuns han sabido "resistir a los embates de la polarización global y local" y mantenerse como un espacio "catalanista y diverso" que ha logrado gobernar durante ocho años la ciudad de Barcelona con "políticas transformadoras".
Un legado para "reconectar"
Antes de dejar el último cargo orgánico que le quedaba, la coordinación de Catalunya en Comú que ahora quedará en manos del tándem Candela López-Gemma Tarafa, Colau ha sacado pecho de su legado tras años bregando para situar en la centralidad de la agenda política debates como el derecho a la vivienda y el cambio climático. Hasta el punto de, ha añadido también Jéssica Albiach y la misma López, de ser "determinantes" a nivel estatal, catalán y municipal en Barcelona.

Ada Colau con Jéssica Albiach y Candela López en el cierre de etapa como coordinadora de Catalunya en Comú / ACN
No obstante, el diagnóstico que hacen los Comuns es que tienen que "reconectar con la ciudadanía, impugnar lo que Colau denomina como las "pasiones tristes" -ir más allá del carril de la gestión en las instituciones-, las "resignaciones" y las "impotencias" que impactan en las clases trabajadoras. "Tener la razón no significa tener un buen resultado electoral", ha apuntado Albiach, que también se despide del liderazgo orgánico del partido para centrarse en la presidencia del grupo en el Parlament, y que ha puesto también el foco en uno de los grandes retos que tiene el partido: lograr ser un partido que arraigue más allá del área metropolitana.
Alejar al PSC del "frente conservador"
"Frenaremos la ampliación del aeropuerto. 'No' al crimen contra la población y el medio ambiente". "Me da vergüenza como catalana que el president Salvador Illa no sea capaz de suspender las relaciones con Israel". "Con la vivienda hay quien obtiene beneficios astronómicos mientras las familias están siendo expulsadas". "Regular el turismo significa decrecer". Son algunas de las consignas que se han lazado desde el escenario del congreso y que recogen la esencia de la nueva hoja de ruta que validarán con la mirada puesta en el próximo ciclo electoral.
En debate está cómo compaginar esa agenda con colaborar con los gobiernos liderados por los socialistas, con la incógnita abierta en si en algún momento pedirán entrar en el Govern de Salvador Illa. Albiach ha resumido la dicotomía a la que se enfrenta Catalunya en la nueva etapa: o un "frente conservador" en el que ubican a la derecha pero también "un sector" del PSC o "mayoría popular". Para que la balanza se decante hacia la segunda opción ha hecho un llamamiento a las fuerzas progresistas para que "ni hagan políticas de derechas" ni pacten con ellas sean o no independentistas, un mensaje especialmente dirigido al PSC, que continua tendiendo la mano a Junts pese a considerar a ERC y a los Comuns sus socios prioritarios.
López dejará el escaño de diputada
López, la única que seguirá como coordinadora del triunvirato que ha gobernado los Comuns en los últimos cinco años, ha proclamado que, ahora sí, es momento de ocuparse de pleno a "articular organización". Para ello, y para predicar "con el ejemplo" de no acumular cargos que recoge el código ético del espacio, ha anunciado que dejará el acta de diputada en el Congreso, cargo que hasta ahora ha compaginado con el de liderar el partido y con ser vicepresidenta de la Diputación de Barcelona. Las "contradicciones" que señalaba Colau nunca son fáciles de gestionar ni ayudan a "enamorar".
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