¿En qué ha tendido Illa la mano a la oposición? De las concreciones en financiación al salario mínimo catalán

La estrategia de Salvador Illa pasa por convertir el PSC en un 'catch all party', un partido atrapalotodo capaz de compensar la minoría del Govern con acuerdos a izquierda y a derecha para garantizar su estabilidad. De ahí que preconice que piensa "hablar con todos" a excepción de la extrema derecha. En el intercambio con la oposición que protagoniza este miércoles el debate de política general, el president ha dejado claro que ERC y los Comuns son sus socios prioritarios y que mucho más frío es el vínculo con Junts. Pero aun así, ha recogido el guante en alguna de las carpetas que le han puesto encima de la mesa y que van más allá del proyecto que ha desgranado.

El salario mínimo catalán y las competencias en inmigración

El tono del toma y daca con Junts ha sido áspero. Illa ha recriminado al partido de Carles Puigdemont que opte por el camino de "desestabilizar" y lo ha emplazado a responder si cree que con un Gobierno de PP y Vox en Madrid a Catalunya le hubiera ido mejor. Sobre la petición que le han hecho los posconvergentes de que se "plante" ante Pedro Sánchez ante el reparto del techo de gasto, se ha limitado a pedir "no mezclar libretas" entre lo que se negocia en el Congreso y en el Parlament. No obstante, el president se ha comprometido a "estudiar" el salario mínimo de referencia catalán de 1.400 euros que defiende Junts y se ha mostrado dispuesto a asumir las competencias en inmigración, además de recordar que la protección del catalán ya forma parte de su proyecto gubernamental.

Concreciones sobre la financiación singular

La advertencia de ERC a Illa ha sido clara: sin concreciones en financiación no habrá presupuestos de 2025. Y el president ha respondido de forma diáfana: la consellera de Economia, Alícia Romero, está trabajando con discreción y habrá "concreciones" en incrementar los recursos de la Agència Tributària de Catalunya. "Nos vamos a dejar la piel en que haya una financiación singular", ha sentenciado. También ha reiterado que la defensa del catalán es una de sus "principales responsabilidades" y que por ello pactó con los republicanos crear la conselleria de Polítiques Lingüístiques y pretende aprobar antes de final de año el Pacte Nacional per la Llengua heredado de la legislatura anterior. "Ya hemos escogido, hemos escogido los acuerdos de progreso", ha respondido a la pregunta de los republicanos de que a los socialistas les toca escoger con quién transitan la legislatura.

Interlocución con los alcaldes y petición sobre el catalán

Bronco ha sido también el intercambio con el PP, a quien el president de la Generalitat ha acusado de representar el "autoritarismo y la prosperidad excluyente" y de quien no ha recogido ni el ruego de no pactar con el independentismo ni la propuesta de bajar impuestos en Catalunya. Aun así, Illa no ha renunciado a reforzar vínculos con dirigentes populares. Ha mencionado, en concreto, los alcaldes de Badalona y Castelldefels, Xavier García Albiol y Manuel Reyes, con quienes ha prometido hablar sobre cómo mejorar el acceso a la vivienda con más pisos públicos y afrontar la multirreincidencia. El president también ha instado al PP a sumarse a la defensa del catalán recordando el apoyo a la lengua que, a su juicio, dan los populares en Galicia. La petición ha caído en saco roto.

Sanciones a quien incumpla con los precios del alquiler

Los Comuns, socios prioritarios de Illa, han pedido al president más mano dura con quien incumpla la ley de vivienda, y éste ha respondido que está dispuesto a activar el régimen sancionador para quien no se ajuste con los topes fijados a los alquileres. También ha avalado que hay que regular los contratos de temporada, aunque lo deja en manos del Gobierno y no de la Generalitat. No ha habido, en cambio, entente con la ampliación del aeropuerto de El Prat, que el Govern defiende pese a la oposición frontal de los Comuns, que piden "límites" al turismo; y sí sintonía para impulsar la mejora de Rodalies, además de asumir la gestión en los términis pactados con el PSOE.

Receptivo a propuestas sobre vivienda

Es evidente que no hay mayonesa posible de ligar entre Illa y la CUP, pero aun así ha habido lugar para que el president haya explicitado que está "dispuesto a recibir propuestas" sobre vivienda tomando como referencia el modelo de Países Bajos y Canadá. Los anticapitalistas consideran que las políticas anunciadas por el Govern se enmarcan en las "recetas posconvergentes".

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