Congreso en noviembre

Los Comuns preparan la elección de los liderazgos para la época post-Colau

Ada Colau deja el Ayuntamiento de Barcelona y confía en la victoria de los Comuns en 2027

Colau no descarta volver a optar a la alcaldía de Barcelona tras su adiós para centrarse en "tejer alianzas internacionale

Las coordinadoras de Catalunya en Comú, Ada Colau y Jéssica Albiach, con el ministro Ernest Urtasun

Las coordinadoras de Catalunya en Comú, Ada Colau y Jéssica Albiach, con el ministro Ernest Urtasun / ACN

Sara González

Sara González

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Pese a que son los congresos de los partidos independentistas los que hasta ahora han acaparado todo el foco, también los Comuns preparan el suyo para el 16 y el 17 de noviembre con un reto no menor entre manos: el de definir qué liderazgos tendrá la formación tras el adiós de Ada Colau y a la espera de si Jéssica Albiach y Candela López apuestan o no por continuar como coordinadoras nacionales. Por ahora no han emergido controversias internas, pero no quiere decir eso que sea un conclave fácil para Catalunya en Comú: el varapalo en las elecciones catalanas y en las municipales obliga a redefinir estrategia, la alianza con Sumar no ha logrado despegar a nivel estatal, por el camino se ha roto el vínculo con Podem y la retirada de Colau supone la pérdida de su mayor activo político. Sin embargo -paradojas de la política-, son más influentes que nunca en la Generalitat con la llegada de Salvador Illa al Govern de la mano de su voto y el de ERC.

Determinar quién lleva las riendas del espacio y con qué hoja de ruta son las principales carpetas que los Comuns tienen abiertas de par en par en la que será la cuarta asamblea de Catalunya en Comú desde su fundación hace ante tan solo siete años. Esta proporción prueba la ajetreada trayectoria que ha vivido en términos electorales la confluencia que echó a andar con Xavier Domènech para aglutinar bajo un mismo paraguas a Barcelona en Comú, ICV, EUiA y Podem, pero que afrontó las últimas elecciones catalanas ya divorciada de los morados.

La decisión de Albiach

La marcha de Colau obliga a recomponer el triunvirato que ha gobernado el partido desde 2019. Hace tres meses, Albiach auguró que se abriría una nueva etapa con "cambio de caras" dejando entrever que también ella podría dejar paso a su relevo. Pero la decisión no está todavía tomada -hay dirigentes que le animan a continuar-, como tampoco está la de López, diputada en el Congreso. Ambas están en plena de ronda de consultas.

Los estatutos del partido permiten que la coordinación nacional esté formada por entre dos y cuatro personas y la actual dirección trabaja para garantizar una combinación entre "nuevas caras y continuidad", por lo que se podría sumar un nombre más a la cúspide del partido, que tiene que ser paritaria. No obstante, en la cúpula de los Comuns ya asumen que el liderazgo de Colau es "inigualable" e "insubstituible". El consuelo, aseguran, es que podrán seguir contando con su "capital político" porque mantendrá el vínculo implicándose en la Fundació Sentit Comú, concebida como el 'think tank' del espacio.

Cómo reflotarlo será uno de sus cometidos de cara al siguiente ciclo electoral, la misma hipótesis que tienen encima de la mesa los encargados de elaborar la nueva hoja de ruta que también tendrá que validarse en el congreso. Ese documento estratégico y organizativo estará listo en dos semanas y se someterá a debate de las bases. También será a partir de entonces cuando se abra oficialmente la veda de los liderazgos.

La relación con Sumar

"Nos preocupa por qué no estamos conectando, asentar el proyecto y repensarlo después del ciclo electoral del que venimos", aseguran fuentes de la dirección. Tras haber perdido la alcaldía de Barcelona -aunque mantuvieron el tirón quedando terceros a tan solo 300 votos del PSC- y otras históricas como la de Montcada i Reixac, tuvieron un respiro en las generales, donde quedaron segundos en Catalunya y fueron clave para que el gobierno de coalición del PSOE con Sumar fuera posible. Pero en las pasadas catalanas bajaron a seis escaños y todos ellos se obtuvieron solo en la provincia de Barcelona, un revés al que se sumó el 'sorpasso' que les hizo Podem en las europeas, en las que quedaron en séptima posición.

Con este historial, romper la dicotomía entre área metropolitana y el resto de Catalunya, donde han ido perdiendo fuelle, y reponerse para las municipales de 2027 son parte de sus prioridades, además de reforzar la marca Comuns -sin más añadiduras- tras años en que han convivido distintas nomenclaturas. En Barcelona continúan siendo competitivos, pero se preguntan "cómo volver a ser atractivos" para el votante de izquierdas más allá de la capital. Y otro debate pendiente será el del vínculo con Sumar, proyecto que entienden que se deberá "reformular", pero sin prisas teniendo en cuenta que no hay por ahora elecciones a la vista.

En la ponencia de la anterior asamblea hace tres años, la hoja de ruta aprobada por los Comuns recogía específicamente el objetivo de "hacer a Yolanda Díaz la próxima presidenta del Gobierno". Los socios catalanes se volcaron de pleno con la actual vicepresidenta, pero habrá que ver qué lugar ocupa ahora su figura después de su dimisión como líder de Sumar por el descalabro en las europeas, que se sumó al de Galicia y Euskadi y al retroceso en Catalunya. Con Podem, las relaciones están completamente rotas e irreconducibles en estos momentos por ambas partes. Pese a que el proyecto entra en una fase de recomposición, los Comuns se agarran al papel determinante que tienen ahora en la legislatura catalana con Illa como president mientras opere la mayoría de la investidura con el PSC y ERC, con la incógnita de si en algún momento acabarán o no entrando en el Govern.

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