Cambios en la institución

Laura Borràs asume su relevo en el Parlament y libra batalla en Junts para designar a su sustituto

Las 3 claves sobre el futuro político de Laura Borràs

¿Quién gobernará cada diputación en Catalunya?

El PSC pugnará por el cargo y propone a Assumpta Escarp como presidenta de la institución

La presidenta de Junts y expresidenta del Parlament, Laura Borràs, durante una sesión plenaria en el Parlament, a 19 de abril de 2023, en Barcelona, Catalunya (España).

La presidenta de Junts y expresidenta del Parlament, Laura Borràs, durante una sesión plenaria en el Parlament, a 19 de abril de 2023, en Barcelona, Catalunya (España). / David Zorrakino - Europa Press

Sara González

Sara González

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En tan solo una semana, el Parlament cerrará de forma definitiva la etapa de Laura Borràs y escogerá una nueva presidencia. Un relevo que por primera vez ha asumido públicamente la presidenta de Junts. Atrás queda el desafío por dejar la silla vacía que semanas atrás vindicaron algunos de sus afines como el propio Quim Torra. Eso sí, quién será su sucesor es lo que ahora está en disputa tanto dentro del partido, que abordará esta cuestión en una reunión de la dirección el martes, como fuera, ya que el PSC, dispuesto a pescar de nuevo en las aguas revueltas del independentismo si no logra ponerse de acuerdo, también está dispuesto a disputar el cargo.

El relevo de Borràs tras 11 meses de interinidad en la institución será un termómetro del pulso interno entre los defensores y los detractores de la presidenta de Junts. De momento, en sus primeras palabras tras la retirada de su escaño, la dirigente ha negado que "se esté planteando ningún nombre" para sustituirla, a pesar de que hace meses que el nombre de la exalcaldesa de Vic Anna Erra está encima de la mesa con el visto bueno del sector más pragmático. Lo que pretende Borràs es ser ella misma quien dirija esa operación con la vista puesta en blindarse en el cargo de presidenta del partido, el único que le queda. Eso sí, continuará cobrando más de 8.000 euros mensuales -el sueldo que le corresponde como expresidenta- hasta que los partidos cambien la ley, una modificación que está en estos momentos en trámite.

No ha sido baladí que en una entrevista en Catalunya Ràdio Borràs haya dejado caer que Antoni Castellà, el líder de Demòcrates -escisión independentista de la extinta Unió Democràtica-, que entrará como diputado tras la retirada del escaño a Borràs, sería "un magnífico presidente" del Parlament. Y es que el otro nombre que estaba en las quinielas, el de la alcaldesa saliente de Girona Marta Madrenas, ya ha encontrado un destino en las listas de las elecciones generales del 23 de julio. Después de que el partido dirima sobre quién quiere que recaiga el mando de la segunda institución de Catalunya, será el turno del acuerdo con ERC para poder tener la mayoría necesaria en el hemiciclo.

El PSC, al acecho

El presidente de los republicanos, Oriol Junqueras, ya allanó este miércoles el camino del pacto cuando explicitó que el cargo debe ser para Junts. Su ofrecimiento es acordar un relevo tranquilo que mantenga el equilibrio con el que fue investido el 'president' Pere Aragonès: el Govern para los republicanos, la Cámara catalana para los posconvergentes. Aún así, Borràs no ha sido precisamente condescendiente con los republicanos, puesto que ha acusado a la Mesa de la Cámara y, por ende, a la vicepresidenta primera, Alba Vergés, de ser "un actor de la represión" y de apartarla "de una manera consciente, proactiva y voluntaria". También ha llegado a defender que su caso es distinto al del exdiputado de la CUP Pau Juvillà pese a que este perdió el escaño sin tener condena firme mientras era Borràs quien dirigía la institución.

Con estas credenciales que presenta un independentismo que intenta recoser complicidades tras el batacazo de las municipales, el PSC ha decidido mover ficha y proponer a la vicepresidenta segunda del Parlament, Assumpta Escarp, como líder de la institución. Era la candidata lógica para los socialistas teniendo en cuenta que, desde la suspensión de Borràs, ha gobernado la Cámara haciendo tándem con la republicana Alba Vergés. El movimiento llega después de que los Comuns anunciaran que también presentarán al parlamentario Joan Carles Gallego para optar a la presidencia y de que Ciutadans haga también lo propio con Matías Alonso.

Los socialistas llevan desde el pasado otoño insistiendo a los independentistas que pusieran punto y final a una interinidad que tachan de "inaceptable" y que consideran que denigra la institución. Salvador Illa defendió que no era su prioridad ocupar la presidencia del Parlament, pero finalmente y ante la falta de un acuerdo entre los independentistas que por ahora no ha llegado, ha apostado por disputarla. Lo hace, además, en plena ebullición de las negociaciones en el ámbito municipal, con el Ayuntamiento de Barcelona y la Diputación de Barcelona como principales batallas.