Junqueras descarta la lista única y apuesta por un "acuerdo programático" del independentismo

ERC entiende que el "frente democrático" al que ha apelado el 'president' de la Generalitat, Pere Aragonès, para gestionar el escenario de las elecciones generales tras el batacazo del independentismo en las elecciones municipales debe traducirse en un "acuerdo programático" y no en una candidatura conjunta como reivindica Junts. Así lo ha manifestado el presidente de los republicanos, Oriol Junqueras, que también ha abogado por priorizar las alianzas entre independentistas tanto en Barcelona para que Xavier Trias sea alcalde, como en el resto de municipios y en el ámbito supramunicipal, es decir, en las diputaciones.

"No compartimos propuestas del pasado que han demostrado sus límites y que tienen un objetivo puramente táctico contra la presidencia de la Generalitat", ha afirmado Junqueras tras haberse reunido con Aragonès sobre la lista única que espolea el partido de Jordi Turull y Laura Borràs. Justo antes de la comparecencia de Junqueras, el choque entre el 'president' y Junts ha marcado la sesión de control en el Parlament precisamente a cuenta de ese frente común. Para los republicanos, eso debe significar que, de cara a las generales, ERC, Junts, los Comuns y la CUP -en caso de que concurra- se comprometan en sus programas a defender la autodeterminación y la amnistía, la lengua y la escuela catalana, los derechos fundamentales, las libertades individuales y el fin de la represión.

Fuera ha dejado Junqueras al PSC, a quien ha afeado que esté "orgullosamente lejos" de estos compromisos. De hecho, y pensando en el marco de la campaña de las generales, ha recordado que los socialistas no son garantía de que no haya un gobierno de derechas en el Estado porque en su día se abstuvieron a la investidura de Mariano Rajoy. Cierto es que los barones del PSOE despojaron a Pedro Sánchez del cargo de secretario general por negarse a ello. "Es muy importante que los socialistas no puedan investir al señor Feijóo como hicieron ya con Rajoy", ha sentenciado presumiendo de que su partido no ha pactado nunca con la extrema derecha.

Para Junqueras, la contienda electoral del 23 de julio es "una batalla entre Catalunya y una España reaccionaria" que se "puede ganar" si el independentismo se moviliza. Y, para ello, ha llamado a "rehacer las confianzas" y a "reforzar las instituciones", empezando por el Govern y por la presidencia del Parlament, que ha señalado que debe ser para Junts, y siguiendo por los pactos municipales que ahora tienen entre manos. Eso sí, ha apostillado que "reforzar" al Govern no tiene por qué traducirse en una entrada en el ejecutivo -un ofrecimiento que, en todo caso, correspondería a Aragonès- sino en tener una "actitud constructiva" con el ejecutivo. "El debate debe ser sereno, constructivo y sano", ha reivindicado.

Así pues, además de defender el relevo de Laura Borràs por otro dirigente de Junts ha dicho también sin ambages que "es mejor" que Barcelona esté en manos de un alcalde de un partido vinculado al proyecto independentista que no de un dirigente, Jaume Collboni en este caso, que en 2019 "pactó con la extrema derecha de Manuel Valls" para arrebatarle la vara a Ernest Maragall. "Tenemos que priorizar acuerdos entre formaciones independentistas, nosotros siempre lo hemos hecho así y pedimos a todo el mundo que actúe de la misma manera", un llamamiento que supone una velada referencia a la Diputació de Barcelona, donde el PSC ha gobernado con Junts durante el último mandato y ahora se podría, aritméticamente, repetir la ecuación. De hecho, los socialistas, que mantienen el pulso para arrebatarle la alcaldía a Trias de la mano de los Comuns y ERC, tienen como anzuelo el hecho de poder escoger socio en la diputación para intentar convencer a los republicanos.

Ronda de contactos del 'president'

Tras haber lanzado su propuesta y asegurar que ésta debe quedar en manos de los partidos, Aragonès continúa con la ronda de contactos con los partidos a los que ha interpelado, así que está previsto que se reúna también con Junts y con la CUP. A los Comuns también los ha incluido en ese frente, pese a que Jéssica Albiach ya ha dejado claro que su formación no piensa participar en lo que entiende que es una "huida hacia el pasado" tras la caída electoral de los independentistas.