Cita con las urnas

Las 5 claves del programa electoral de Ernest Maragall para Barcelona

¿Quién ganará la batalla de Barcelona?

Maragall acusa a Collboni de ser el representante del caos de Rodalies en Barcelona

Ernest Maragall

Ernest Maragall / ACN/Silvia Jardí

Xabi Barrena

Xabi Barrena

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El programa electoral con el que Ernest Maragall tratará de revalidar su triunfo en Barcelona cuenta con más de 2.000 propuestas, divididas en 13 apartados. Estas son sus principales claves.

Turismo

El programa republicano saca pecho, y jugo, de su propuesta, durante el mandato, de crear una tasa turística. Para el periodo 2023-27, Maragall propone incrementar progresivamente la tasa , con el fin de poder superar a corto plazo los 100 millones de euros anuales de ingresos. Con esos 400 millones (100 por año) se prevé paliar los efectos nocivos derivados del turismo para la convivencia. Así, los republicanos proponen llevar a cabo un plan de choque para Ciutat Vella, a controlar el alojamiento ilegal, la mejora de la calidad de vida de las personas residentes en los barrios más turísticos.

En un segundo término, proponen reducir la densidad de turística, vía ampliando el espacio por donde circulen, así como los periodos del año en que se acercan a la capital catalana. Asimismo, ERC apuesta, a través del órgano técnico con la Generalitat y el Port de Barcelona, por reducir los cruceristas en tráfico (quienes hacen escala durante pocas horas en Barcelona). En materia medioambiental, y para atraer los barcos de última generación, ERC se obliga a avanzar en la electrificación de los muelles para reducir la contaminación generada de los cruceros.

Vivienda

El problema de la vivienda, que según explicó la republicana Eva Baró este martes ha subido de precio un 40% desde que Ada Colau es alcaldesa, es la escasez de oferta. Frente a ello, ERC propone aumentar el parque de alquiler asequible (público y privado) en 20.000 viviendas, 8.000 de las que serán vivienda asequible. Para conseguirlo, se construirá obra nueva (el puerto, la Zona Franca, Deportes UB-Hospital Clínic, en la Diagonal), pero también se promoverá la rehabilitación de fincas y la movilización de pisos ya existentes vacíos. En línea con el Govern, Maragall, si es elegido alcalde, exigirá al Estado la movilización de viviendas de la SAREB .

Seguridad

Maragall recupera una de las propuestas del cuando el PSC gobernaba la ciudad, la creación de un juzgado de proximidad en cada distrito para reducir los plazos judiciales, mejorar la percepción de seguridad y poner fin a la multirreincidencia. El objetivo es actuar de filtro y resolver conflictos menores, sin que sea necesario que lleguen a los tribunales de justicia. Serán oficinas que se convertirán en un espacio entre la carrera judicial y la justicia de paz, formados por 'jueces temporales' profesionales del derecho, al margen de la carrera judicial. En el ámbito de actuación civil, afectará a los asuntos de menor cuantía (juicios verbales), reclamaciones inferiores a 3.000 euros, propiedad horizontal, arrendamiento de viviendas, reclamaciones de consumidores... En el ámbito penal afectará a los delitos leves, exceptuando los de violencia machista.

Asimismo, ERC plantea la creación de la figura del 'alcalde noche', responsable del funcionamiento de la ciudad en el horario nocturno. Este nuevo cargo coordinaría y controlaría las tareas municipales y la vida en la ciudad entre las 22 horas y las 6 horas con un equipo de inspección de la actividad nocturna. En paralelo, se reforzaría a las unidades nocturnas de la Guardia Urbana, especialmente en los macroeventos, para realizar controles de alcoholemia y drogas a los conductores.

Obras en el mandato

La aproximación que Maragall realiza al necesario (cambio climático obliga) cerco a la circulación de vehículos por la ciudad pretende ser menos traumática y repentina que la de la actual alcaldesa. Así, el programa establece casi siempre criterios generales, para que puedan ser aplicados en toda la ciudad "no solo en 21 calles" señaló el martes Maragall. Así, se propone invertir la proporción del espacio ocupado por las calzadas (actualmente del 60%) con el del espacio caminable por las aceras (actualmente del 40%), para dar verdadera prioridad al peatón de la ciudad, pasando al 40% para la movilidad y al 60% para el peatón. Igualmente, en aquellas calles de la ciudad con una sección inferior a 12 metros se daría prioridad a los peatones. Y el programa prevé la pérdida de un carril rodado en todas las calles de 20 metros o más de ancho, por ejemplo, todas las del Eixample. Todo ese espacio ganado en las operaciones se convertiría en acera para el peatón.

Por otro lado, el programa entra en el detalle de dos calles y propone cambios en la Gran Vía y en la calle de Aragó, para convertirlas de autopistas urbanas a corredores verdes. La Gran Vía pasaría a ser de doble sentido, como en la actualidad lo es la avenida de la Diagonal, dejando carriles segregados para el transporte público y carriles bici, para posibilitar la transformación de la calle de Aragó. Esta reduciría espacio destinado a la circulación, que se ganaría en el lado montaña, para liberar las aceras, destinar el espacio ganado a los peatones aumentando el número de árboles para convertirlo en un auténtico corredor verde desde la calle de Tarragona hasta la avenida Meridiana.

El manual de gobierno de ERC se hace eco de una de las operaciones urbanísticas más ambiciosas, puesta en la mesa hace años, como la prolongación de la Diagonal hasta el Llobregat, para convertir lo que es una autopista en avenida. Se trata, obviamente, de un proyecto metropolitano por cuanto afectaría a los municipios de Sant Feliu de Llobregat, Sant Just Desvern, Sant Joan Despí y Esplugues de Llobregat y atravesando el río hasta Santa Coloma de Cervelló.

En cuanto a la cobertura de la Ronda de dalt, Maragall aboga por su progresiva cobertura para crear un gran espacio caminable. Es decir, no pone tanto ahínco como el expresado por Xavier Trias, que casi convertía esta cobertura en su obra estrella, ni tampoco pretende convertir la nueva calzada en un gran parque, como la operación Madrid Río que hipotecó la capital española, en manos entonces de Alberto Ruiz-Gallardón.

Recuperación símbolos barceloneses

Ernest Maragall plantea en su programa recuperar algunos de los símbolos de la Barcelona del siglo XX. Así, por ejemplo, aboga por poner en servicio de nuevo el Tranvía Blau así que sea posible. Además, y ya en materia arquitectónica, Maragall se propone recuperar el cuartel del Bruc en la ciudad y convertirlo en un referente de la transformación de los usos militares en usos por la paz y diplomáticos. Ello pasaría por la creación del llamado Districte Internacional de Barcelona - Districte XII, donde se promovería un centro de referencia que aglutine el máximo número de actividad con relevancia internacional que acoge la ciudad y que aborde la diplomacia civil, la paz y las relaciones internacionales. Y con el mismo objetivo, pero en el campo sanitario, el líder municipal republicano plantea recuperar el Recinte Modernista de Sant Pau como sede internacional para la salud global. Curiosamente, el primer uso que se le quiso dar al recinto modernista, tras la construcción del nuevo hospital, se asemejaba mucho al contenido con el que se quiera dotar el cuartel del Bruc. Cuando se efectúe el traspaso del Estado, claro.

Suscríbete para seguir leyendo