Liderazgo de la Cámara catalana

El PSC no descarta optar a la presidencia del Parlament si Laura Borràs es condenada

Los socialistas aseguran que no es su "prioridad" ocupar este cargo, sino pactar con el resto como "recuperar el prestigio" de la institución

El líder del PSC, Salvador Illa, y la portavoz Alícia Romero, en el Parlament

El líder del PSC, Salvador Illa, y la portavoz Alícia Romero, en el Parlament / ACN

Sara González

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Aunque la presidenta de Junts, Laura Borràs, está aún a la espera de la sentencia tras haber sido juzgada por prevaricación y falsedad documental en el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya, el debate sobre qué pasara si es condenada y hay que escoger una nueva presidencia del Parlament está ya en ebullición. Si bien el 'president' de la Generalitat, Pere Aragonès, ha dejado claro que no considera vigente el pacto con Junts para que sea uno de sus dirigentes quien releve a Borràs, el PSC tampoco descarta optar a presidir la institución, a pesar de que, matiza, que esta no es su "prioridad".

"No lo descartamos, aunque nuestro objetivo no es que alguien de nuestro grupo ocupe la presidencia del Parlament, la prioridad es pactar cómo recuperar el prestigio de la institución", ha defendido la portavoz de los socialistas catalanes en la Cámara, Alícia Romero. Fue el pasado mes de septiembre cuando Salvador Illa envió una carta a ERC, Junts y la CUP para ofrecer su apoyo a un acuerdo político para relevar a Borràs. Incluso llegó a plantear un ultimátum y a amenazar con recurrir a la vía reglamentaria. Pero la resignación se acabó imponiendo cuando constataron la inviabilidad jurídica de los caminos planteados para forzar la sustitución si la presidenta suspendida no dimitía, cosa que Borràs se ha negado a hacer con el apoyo de su partido.

Ahora, ha dicho la portavoz socialista, la mano sigue tendida a los grupos independentistas, aunque el partido de Illa matiza que el Govern se rompió y que, por lo tanto, las coordenadas ahora son distintas. El partido de Illa sí que defiende entre bambalinas que lo que no avalará es que sea ERC quien, además de gobernar la Generalitat con tan solo 33 diputados, se queden también con la presidencia del Parlament.

Romero ha pedido, en primer lugar, cautela, ya que ante una sentencia absolutoria Borràs recuperaría el cargo y, por lo tanto, no habría debate. En todo caso, ha subrayado, el Parlament está en "situación irregular, anormal" y esa interinidad en la que lleva sumido desde julio del año pasado "no es buena". "Cuanto antes acabemos con ella, mejor", ha defendido. Y es aquí cuando ha precisado que lo que realmente le importa a su grupo no es tanto qué persona asume la batuta, sino "para hacer qué".