Los 5 escollos que dificultan el encaje del PDECat y los afines a Borràs en la lista electoral de Trias

Cuando dos desconocidos comienzan a negociar, parten de cero, pero cuando la negociación es entre excompañeros de partido que se han divorciado a gritos, entonces la posibilidad de un acuerdo se hace más difícil. Estas son las claves de las dificultades del candidato de Junts a la alcaldía de Barcelona, Xavier Trias, para intentar incorporar a su lista electoral a los posconvergentes del PDECat y al sector antagónico a ellos: los fieles a la presidenta de JxCat, Laura Borràs.

El dinero

No solo se están negociando los nombres de la lista de Trias, es decir, los posibles concejales, se negocia también sobre dinero. Concretamente el que percibe Junts en el Congreso, el Ayuntamiento de Barcelona y en el Área Metropolitana. En la Cámara baja, la ruptura entre los de Carles Puigdemont y el PDECat hizo que el grupo de ocho diputados que formaban JxCat se convirtiera en dos grupos de 4 diputados. Los de Míriam Nogueras se quedaron con el nombre y el PDECat actúa con el suyo. Hasta ahí todo claro, salvo que según denuncia el PDECat, el dinero de los ocho parlamentarios se lo quedan solo los cuatro fieles al 'expresident'. Otro tanto denuncia el caso de los representantes del partido en el ayuntamiento de Barcelona, expulsados de Junts tras la ruptura entre ambos bloques, y que no reciben en cambio la asignación económica correspondiente.

Todo este dinero se añade a viejos rencores económicos, respecto a lo que ha pagado el PDECat en abogados del 'procés' y "nóminas de los presos". Además, "nos estamos comiendo toda la mierda de CDC", afirma un representante de la posconvergencia en relación a los casos de corrupción que afectan al partido fundado por Jordi Pujol.

Coalición sí, coalición no

Además, el PDECat reclama, por ahora sin éxito, formar una coalición con Trias, en la que Junts no sea el nombre de la propuesta política y electoral. Sería pues una coalición en la que el PDECat aportaría los derechos electorales -los partidos con representación en las últimas elecciones tienen derecho a espacios gratuitos de propaganda electoral- a cambio de que la candidatura sea una plataforma en torno a la figura de Trias. Por eso en el PDECat incomoda tanto que Trias esté dando apoyo a candidatos locales de Junts, porque quieren borrar estas siglas de la candidatura electoral. Sobre esto tampoco hay acuerdo.

La lista

El PDECat ha reclamado directamente a Trias que se implique en unas negociaciones que están aparentemente estancadas. Trias de hecho es quien ha reclamado a su actual formación, Junts, que le de manos libres para formar su equipo, exponer su proyecto y pactar con quien quiera y que, además, el partido guarde silencio y cierre filas. Con estos mimbres, es difícil que el PDECat logre nombres en puestos destacados de la lista. Los claves son los diez primeros, que son los que si se cumplen las encuestas, tienen posibilidades de ser escogidos. El PDECat pide nombres, en plural, y sobre ello tampoco hay pacto. El nombre de la 'exconsellera' de Unió, Joana Ortega, ha estado sobre la mesa pero genera mucho recelo en el entorno de Trias. La posconvergencia, por su parte, se queja de que Trias, o en su defecto el secretario general del partido Jordi Turull, quieren ganar la negociación por diez a cero.

Borrasistas "ni en pintura"

En el extremo ideológico antagónico al PDECat está el sector de Junts afín a Borràs, visiblemente molesto con la dinámica del partido en favor de Trias. No comparten la ideología de Trias, al que ven muy tibio en el terreno independentista y escorado a la derecha. Lamentan la falta de referencias al 'procés' durante la precampaña. Y se sienten ninguneados por el partido, porque ven a Trias más centrado en incorporar al PDECat que no representar la pluralidad interna de Junts. Han puesto sobre la mesa tres nombres de personas con sensibilidad cercana a Borràs para formar parte de la lista pero la dirección del partido no los ha incorporado. Las partes se han emplazado a una nueva reunión la próxima semana, mientras los afines al alcaldable afirman que a los borrasistas no quieren verlos "ni en pintura" en la lista. Los que representan al sector borrasista denuncian que hasta ahora Trias no representa al conjunto de Junts ni por la lista ni por su estilo de precampaña.

Los rencores

El PDECat sigue acusando a Jordi Sànchez, exsecretario general de Junts, y a Puigdemont, de haber perpetrado una maniobra para quedarse en su día con las siglas que compartían, Junts, en el proceso de divorcio que ejecutaron hace dos años y medio. En cambio, los de Junts sostienen que el PDECat se había convertido en un lastre por sus posiciones tíbias en en eje independentista y haber apostado por pactos como el alcanzado con el PSC en la Diputación de Barcelona o el apoyo a la moción de censura contra Mariano Rajoy por parte de Pedro Sánchez, líder del PSOE. Estas discrepancias internas llevaron al divorcio. Un divorcio todavía reciente y que hace muy difícil que ambos se vuelvan a sentar juntos ahora en una misma apuesta electoral.

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