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El Parlament aprobará en tiempo récord los presupuestos del Govern

Salvador Illa salva los presupuestos y Pere Aragonès apuntala la legislatura

Presupuestos de Catalunya: las grandes infraestructuras pactadas con eufemismos

La Cámara catalana tramitará las cuentas en 37 días para que queden aprobadas el 10 de marzo

La consellera d'Economia, Natàlia Mas, entrega los presupuestos al Parlament

La consellera d'Economia, Natàlia Mas, entrega los presupuestos al Parlament / Ferran Nadeu

Carlota Camps

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La negociación de presupuestos ha sido larga, muy larga, pero ahora el objetivo es que la tramitación parlamentaria sea lo más breve posible. Tras la aprobación por parte del Govern, la titular d'Economia, Natàlia Mas, ha entregado el proyecto a la cámara catalana y ya este jueves por la tarde empezaran las comparecencias de 'consellers' en comisión con Laura Vilagrà (Presidència) y Roger Torrent (Empresa i Treball). Si no hay alteraciones, la previsión es que las cuentas estén aprobadas el 10 de marzo.

Son 37 días. Un tiempo récord, porqué en ocasiones anteriores se había alargado por encima de los 40. Se trata del calendario pactado y aprobado este jueves por la Mesa del Parlament y que solo se podría ver alterado si algún partido llevara las cuentas al Tribunal de Garantías Estatutarias, un escenario que, por ahora, no parece estar sobre la mesa.

El debate a la totalidad se celebrará el 14 de febrero, finalizando el día de antes el plazo de enmiendas de retorno. Una vez superado este trámite, las cuentas volverán a la comisiones. El 3 de marzo se reunirá la comisión de Economía para elaborar el dictamen y, finalmente, el 10 de marzo habrá la votación definitiva en el hemiciclo.

El Govern no tendrá problemas para sacar adelante las cuentas, tras el acuerdo con el PSC y los Comuns. Los tres partidos suman 74 diputados, seis diputados más que la mayoría absoluta (68).

El acuerdo entre socialistas y republicanos se ha alargado más de tres meses y han sido necesarias una veintena de reuniones para sacarlo adelante. Hace unas semanas las diferencias parecían insalvables, pero finalmente este miércoles Salvador Illa y Pere Aragonés consiguieron rubricar el pacto.

El escollo más importante eran los macroproyectos, que finalmente han quedado fuera de las cuentas. El Govern ha cedido con la B-40 y el PSC ha aceptado que la remodelación del Aeropuerto del Prat se estudie en una comisión técnica, y que se hable de "modernización", no de ampliación. El Hard Rock Café también seguirá su tramitación ordinaria.