Govern y 'comuns' se encallan en salud y vivienda en la negociación de presupuestos

El objetivo era acelerar la negociación, una maratón de reuniones este miércoles con todos los socios potenciales que diera un espaldarazo a los presupuestos de la Generalitat. Pero la jornada ha culminado sin que el Govern logre amarrar aún ningún apoyo en firme. Los encuentros fluyen, pero sin visos de culminar aún. Con los 'comuns', con quienes la interlocución está más avanzada, la última reunión ha sido de casi 4 horas y los de Jéssica Albiach aún no ven posible que haya 'fumata blanca'. El principal escollo para la entente son las carpetas de salud y vivienda.

"En este ámbito estamos bloqueados, estamos igual que el viernes pasado", aseguran. Admiten, eso sí, que hay "avances significativos" en energía. Por ahora tienen el compromiso del Govern para que la energética pública sea también comercializadora y una línea de 180 millones de euros para instalación de placas fotovoltaicas para particulares y empresas. En el ámbito de movilidad, han pactado que se mantenga la rebaja del transporte público que depende de la Generalitat durante el 2023, así como alargar la T-Jove hasta los 30 años. "La reunión ha ido bien", responden fuentes del Executiu a pesar de que los 'comuns' no ven cerca el acuerdo.

El propósito del 'president' Pere Aragonès sigue siendo que el primer debate de las cuentas en el Parlament sea antes de finales de año y espera que el pacto exhibido este lunes con sindicatos y patronales lo facilite, pero por ahora poco ha cambiado. "Ni en salud ni en vivienda se dan las condiciones para llegar a un acuerdo y son clave", insisten los 'comuns'. Que se destine un 25% del presupuesto de Salut a la atención primaria, que se alcancen los 1.500 millones de inversión en vivienda y que se amplíe en 5.000 pisos -entre nueva construcción y cesiones de la Sareb- el parque público de alquiler son algunas de las prioridades que En Comú Podem ha puesto encima de la mesa.

Tras la reunión de este miércoles, los 'comuns' esperan un nuevo intercambio de documentos, pero ven poco probable, "salvo sorpresas", que haya pacto esta semana. También lo descartan el PSC y Junts. La interlocución con los socialistas avanza, pero Salvador Illa asegura que, si la semana pasada estaban "al principio del principio" ahora están "al principio". La reunión que han mantenido este viernes se ha centrado en las infraestructuras justo en un día en que Rodalies vuelve a ser noticia por el accidente en Montcada i Reixac y el Govern reclama, una vez más, poner fecha al traspaso de la gestión a la Generalitat.

El ejecutivo catalán y Junts también han dado un paso más y han iniciado sus reuniones sectoriales, como estaba previsto tras el intercambio de documentos de la semana pasada. Han abordado las carpetas de salud y la energías renovables en sendas reuniones telemáticas. Con los posconvergentes los encuentros seguirán el viernes.

El líder de Junts en el Parlament, Albert Batet, ha señalado que el ritmo de negociación "sigue siendo lento" y que en los últimos días no ha habido ningún avance significativo: "Sin novedades en el frente", ha resumido. Batet ha precisado que "ve muy difícil" que el Govern pueda aprobar el proyecto de ley de presupuestos a corto plazo y que prevé "una negociación larga". Sin embargo, fuentes republicanas aseguran que la interlocución no va tan mal como pintan sus rivales.