Batet pide usar la palabra "para argumentar, no para herir" tras la tensión en el Congreso

El aniversario de la Constitución, el 44º ya, ha llegado este año tras unos días muy feos en el Congreso de los Diputados con debates que han incluido descalificaciones y palabras gruesas. Ante este clima de tensión, la presidenta de la Cámara Baja, Meritxell Batet (PSC), ha pedido que la palabra se use "para argumentar" y "no para herir". Además, ante la situación económica global derivada de la guerra en Ucrania ha pedido seguir el camino emprendido durante los meses más duros de la pandemia y que las formaciones políticas busquen consensos: "Cuando hemos hecho algo juntos, nunca nos hemos arrepentido".

Desde el 2019, con la entrada de Vox en el hemiciclo, el clima se había enrarecido, pero en las últimas semanas ha empeorado todavía más, llegando a las cotas más altas registradas hasta ahora. A la apreciación de una diputada de ultraderecha sobre que el "único mérito" de Irene Montero ha sido "haber estudiado en profundidad a Pablo Iglesias", le siguió la acusación de la ministra de Igualdad al PP por promover la "cultura de la violación" y continuó con el uso del término "filoetarra" por parte de parlamentarios de Vox para referirse a EH Bildu.

"El debate parlamentario es la exhibición de las mejores virtudes de la palabra", ha recordado Batet tras varios días en los que ha tenido que llamar la atención en varias ocasiones a parlamentarios de casi todo signo político. En ese sentido, ha reclamado que se emplee la palabra "para argumentar, no para herir; para proponer, no para ofender; para construir, no para zaherir". Además, ha insistido en que "la política es una actividad esencialmente conciliadora" y que se debe usar el debate como "instrumento de persuasión, de buscar equilibrios razonables entre posiciones distintas".

Desde que es presidenta del Congreso, Batet ha tenido que llamar la atención de los diputados en cada aniversario de la Constitución. En 2019, ya pidió "respeto y diálogo". "Si nos perdemos el respeto, si entre nosotros crece la desconfianza y traicionamos nuestra solidaridad, estamos dilapidando su legado [el de la Constitución]", declaró entonces. Al año siguiente solicitó a los diputados una lectura "integradora" de la Constitución y que no se traten como "enemigos". Y el pasado año, en diciembre de 2021, pidió "evitar convertir el debate político en constante reproche de inconstitucionalidad".

Batet ha defendido que la Constitución de 1978 fue una "suma de generosidades" que no se basó en "el miedo", sino en la "esperanza". Así, ha apuntado que ante las "vicisitudes históricas" que se están viviendo y que han acrecentado "la preocupación y la incertidumbre" resulta necesario defender "los valores y la unidad".

Cumplir la Carta Magna

En la celebración de la Constitución se ha colado de por medio la renovación del Consejo General del Poder Judicial. Dirigentes del PSOE y de Unidas Podemos, los dos partidos que conforman el Gobierno, han criticado la posición del PP que se muestra garante de la Carta Magna, pero que después no cumple con los artículos que obligan a la renovación del órgano de gobierno de los jueces que este domingo cumplió cuatro años con el mandato caducado. "Hago un llamamiento más a la responsabilidad de los partidos conservadores de la Constitución para que cumplan con sus obligaciones constitucionales, porque mientras no lo hagan, no van a poder dar ninguna lección de constitucionalismo", ha sostenido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Por su parte, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha criticado que el Ejecutivo de coalición dependa de "partidos que se quieren ir de España" y, por lo tanto, que hay un "antes y un después en el consenso constitucional". "Eso es muy preocupante y la amenaza de los partidos anticonstitucionalistas es una amenaza real y lo estamos viendo en decisiones del Gobierno muy sorprendentes que están bordeando la Constitución y están llenando de dudas, recelos y preocupaciones a muchos ciudadanos españoles", ha dicho.

Izado de la bandera

Este martes el acto institucional empezó a las 10.00 con el izado de la bandera organizado por el Ministerio de Defensa. Por primera vez ha tenido lugar en la Carrera de San Jerónimo, aunque hasta ahora se hacía siempre en la plaza de Colón. La presidenta del Congreso y el presidente del Senado, Ander Gil (PSOE), han sido recibidos por el Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el almirante general Teodoro Esteban López Calderón, con quien se ha dirigido al podio situado en la Carrera de San Jerónimo para recibir los honores de ordenanza.

Al acto, han estado invitados representantes de instituciones del Estado y de las comunidades autónomas; el jefe de la oposición, Alberto Núñez Feijóo; diputados y senadores, expresidentes del Gobierno y de las Cámaras, ponentes constitucionales y una representación de los agentes sociales y de la sociedad civil. ERC, EH Bildu, PNV, la CUP y el BNG, han decidido no acudir al acto, como viene siendo habitual. A este gesto de protesta se ha sumado Vox. Su portavoz parlamentario, Iván Espinosa de los Monteros, ha asistido al izado de la bandera, pero después se ha ausentado para no compartir el evento con PSOE y Unidas Podemos.